Ciudad

Cómo será la simplificación de trámites que propone la Municipalidad


La encargada de llevar precisiones al Concejo fue Ana Marzioni, responsable de Administración y Gestión Pública

En el Salón de los Acuerdos “Lisandro de la Torre” del Palacio Vasallo, concejales y funcionarios municipales analizaron un proyecto impulsado por el Ejecutivo local que busca optimizar la gestión de habilitaciones comerciales en Rosario. La reunión contó con la participación de Ana Marzioni, responsable de Administración y Gestión Pública, y concejales de distintas comisiones, quienes abordaron temas clave para agilizar los trámites de habilitación, sin perder de vista el impacto ambiental y la relación de los emprendimientos con la comunidad.

Marzioni comenzó explicando que el proyecto busca un “profundo sinceramiento de lo que no funciona” en el sistema actual. Según la funcionaria, el proceso de habilitación atraviesa hasta ocho áreas municipales, por lo que la iniciativa busca simplificarlo sin afectar las garantías administrativas. “Necesitamos entender el funcionamiento actual para reducir las trabas en el ejercicio de la actividad comercial”, indicó.

En particular, el artículo 19 introduce el certificado de “Libre Uso y Libre Afectación” (LULA), que permite al Ejecutivo eximir ciertos trámites en casos de renovación, transferencia o adición de rubros para establecimientos con más de 10 años de actividad, que cumplan ciertos requisitos, como ausencia de conflictos ambientales o de impacto negativo en el entorno.

Debate sobre el rol del Concejo en las excepciones

Durante la sesión, Julia Irigoitia, presidenta de la Comisión de Gobierno, planteó dudas sobre el rol del Concejo y del área de habilitaciones en el otorgamiento de excepciones. Marzioni destacó que el nuevo modelo busca reducir los casos que llegan al Concejo mediante un proceso más consolidado a nivel municipal. “Queremos establecer ‘supuestos previos’ para reducir las excepciones que históricamente recaen en el Concejo Municipal”, explicó.

Por su parte, la concejala Norma López hizo hincapié en los desafíos ambientales y solicitó una mayor participación del Estado en la revisión de estos aspectos. “La cuestión ambiental no puede quedar en manos exclusivas de los emprendedores; el rol del Estado es fundamental”, remarcó López.

La habilitación exceptiva y los locales en edificios residenciales

El artículo 20 del proyecto establece una habilitación exceptiva para locales en edificios de viviendas colectivas que no cuenten con consorcio o en terrenos sin final de obra. Según Marzioni, este artículo es una herramienta que ya ha facilitado la regularización de clubes y locales en la costa. Sin embargo, López expresó su preocupación sobre casos en los que ciertos proyectos avanzan sin cumplir normativas, generando “hechos consumados” que luego deben ser regulados.

El debate se amplió a otros temas de interés, como las habilitaciones para locales en complejos FONAVI y consorcios residenciales, las normas sobre publicidad en vidrieras y la regulación de los ploteados comerciales. Marzioni aclaró que la ordenanza actual establece que los locales deben renovar su habilitación cada dos años.

Herramientas digitales para simplificar el proceso

Otro de los puntos discutidos fue la implementación de un simulador online en la plataforma de habilitaciones, que permite a los interesados verificar las normativas de restricción y avanzar solo si el trámite es viable. “Lo que no está permitido no puede ser habilitado”, subrayó el concejal Mariano Roca. Sin embargo, Jesica Pellegrini sugirió que el simulador debería anticipar posibles incompatibilidades de rubros, como sucede con los gimnasios, donde la viabilidad depende del LULA.

Esta plataforma permite iniciar, renovar o modificar habilitaciones, una función que, según los concejales, contribuirá a la transparencia y celeridad de los trámites en el ámbito municipal.

Eliminación de restricciones para ciertos rubros

Hacia el final del encuentro, se discutieron los artículos 23 al 26, que proponen derogar restricciones para la radicación de geriátricos, hoteles alojamiento, salas velatorias y estaciones de servicio. Esta modificación busca simplificar los trámites para estos rubros específicos, eliminando trabas burocráticas que dificultan su habilitación en determinados sectores de la ciudad.

Los concejales anticiparon que habrá nuevas reuniones para continuar con el análisis y ajuste de esta ordenanza, cuyo objetivo es transformar el sistema de habilitaciones de Rosario en un proceso más ágil y eficiente, alineado con la realidad de cada barrio y los desafíos ambientales actuales.