Un 3 de abril de 2016 se difundieron millones de documentos vinculados al lavado de dinero y la evasión de impuestos
Cinco años después del escándalo de los Panamá Papers, tras difundirse el 3 abril de 2016 millones de documentos que mencionaron a deportistas, artistas y políticos, entre ellos el ex presidente Mauricio Macri y el futbolista Lionel Messi, el mundo ha sido incapaz de controlar el lavado de dinero y la evasión de impuestos a lo largo del planeta.
La lista con las cuentas ocultas en paraísos fiscales de personas que supuestamente eran responsables de delitos de corrupción fue presentada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).
El nombre Panamá Papers fue utilizado por los medios de prensa para definir la filtración de documentos confidenciales de la desaparecida firma de abogados Mossack Fonseca, con domicilio en Panamá.
En la investigación, realizada en 76 países y por 109 medios de comunicación, aparecen los nombres de gente del deporte, como el futbolista Messi y su padre Jorge, y de la cultura como el Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, o el cineasta español Pedro Almodóvar.
También fueron mencionados el ex presidente egipcio Hosni Mubarak, el asesinado líder libio Muammar Kaddafi y el actual presidente de Siria, Bashar al Assad, según informes de la cadena británica BBC.
En la Argentina, el expresidente Macri fue otro de los salpicados por el escándalo, ya que los documentos revelaron que tenía participación en el directorio de la firma Fleg Tranding Ltd, asentada en Bahamas.
También los documentos lo vinculan con la empresa Kagemusha S.A, sociedad offshore radicada en Panamá, constituida por su padre Franco Macri en 1981.
Si bien el juez federal en lo Penal y Económico Diego Amarante sobreseyó al expresidente a principios de diciembre de 2019, el magistrado continuó la causa contra Gianfranco y Mariano por el blanqueo de capitales que dispuso su hermano como jefe de Estado.
El juez determinó que «las empresas no habían tenido ganancias, ni en el país ni en el Exterior, ni los directores -por Mauricio Macri, sus hermanos Mariano y Gianfranco, y su padre Franco, ya fallecido- cobraron honorarios».
Pero el magistrado desestimó la presunta evasión impositiva de Macri vinculada a las sociedades Fleg Tranding Ltd y Kagemusha.
El expresidente, por su parte, dijo que nunca tuvo participación en el capital de esas sociedades y que por eso no había incorporado estas dos firmas en su declaración jurada patrimonial.
En el caso de los Messi, ellos habían asegurado en abril del 2016 que la compañía offshore Mega Star Enterprises Inc. estaba «totalmente inactiva», pero una nueva filtración del ICIJ en junio de 2018 dijo que siguió vigente. Sin embargo, esta empresa resultó ser «desconocida» para el fisco español.
Por lo tanto, dicha firma no fue incluida en la denuncia de la Justicia española que derivó en una condena contra el jugador por evasión de impuestos, y su abogado aseguró que la situación del astro frente al fisco español estaba completamente regularizada.
«Hoy, lamentablemente, no hay más transparencia desde los ‘Panamá Papers’; de ninguna manera. El tema del lavado del dinero se ha deteriorado en los últimos años, a pesar de que hay instituciones que lo combaten implacablemente», dijo a Télam Norberto Consani, director del Instituto de Relaciones Internacionales (IRI), dependiente de la Universidad de La Plata.
Para este analista, «el lavado de dinero es el gran ´talón de Aquiles´ de la economía internacional».
Consani afirmó que «evidentemente, este flagelo es como una pileta que está agujerada por la que se le escurre el chorro con dinero mal habido. En este sentido, el mundo o la globalización no han logrado controlar esta gran evasión mundial, vinculada con las drogas, el narcotráfico, el terrorismo y la corrupción, que la vivimos palmariamente en América Latina».
La investigación, considerada la más grande del periodismo mundial, sacó a la luz 11,5 millones de documentos, referidos a más de 214.000 entidades offshore en alrededor de 200 países y territorios.
Sólo habían pasado 48 horas de la divulgación de los documentos del ICIJ cuando renunció a su cargo el primer ministro de Islandia, Sigmundur Gunnlaugsson.
Por otra parte, el ex primer ministro británico, David Cameron, reconoció que él y su esposa tenían acciones en un fideicomiso offshore creado por su padre, antes de venderlas en 2010.
Según Global Witness, una ONG con oficinas en Londres y en Washington, sólo seis Estados, incluido el Reino Unido, cumplen con las demandas para combatir el lavado de dinero, informó en marzo de 2020 el diario británico The Guardian.
Sin embargo, otra organización especializada en el tema, Tax Justice Network, precisó que los llamados territorios de ultramar británicos como las Islas Vírgenes, las islas Caimán y Bermudas están entre las principales cuevas fiscales del mundo.
La mayoría de los 27 Estados miembros de de la Unión Europea (UE) han fracasado en introducir registros públicos para conocer a los dueños reales de las compañías ubicadas en paraísos fiscales, una medida de transparencia considerada clave contra el lavado de dinero.