Según datos del Ministerio del Interior, otras 253 fueron heridas con gases y 405 sufrieron lesiones oculares
Según datos del Ministerio del Interior, otras 253 fueron heridas con gases y 405 sufrieron lesiones oculares
Casi 23.000 detenidos, 253 heridos por bombas lacrimógenas y 405 con lesiones oculares es el balance de los tres meses de crisis social que sufre Chile, según datos del Ministerio del Interior y el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).
El Ministerio del Interior registró más de 1.300 imputados por delitos de saqueos, incendios y daños, y 33 investigaciones abiertas que abarcan más de 1.900 causas en todo el país, en el contexto de las protestas, según el diario santiaguino El Mercurio.
En tanto, un informe publicado por el INDH -estatal pero autónomo- explica que en el marco del estallido social desatado el 18 de octubre pasado «han ocurrido graves violaciones de derechos humanos».
El organismo contabilizó 3.649 heridos y 1.080 acciones judiciales vinculadas a las protestas hasta el miércoles pasado, según el trabajo, publicado en su sitio web.
Desde el 19 de octubre pasado, el INDH realizó 1.022 visitas a 67 hospitales y otros centros de salud y constató 3.442 personas heridas registradas en esos lugares.
El INDH contabilizó 1.974 personas heridas de armas de fuego -la cantidad de niños heridos por arma de fuego asciende a 86-, además de 296 personas con traumas oculares.
«Adicionalmente, equipos de salud de la Cruz Roja Chilena, voluntarios del Servicio de Atención Médica de Urgencia (SAMU) de Santiago y otros grupos de estudiantes de carreras de salud y voluntarios/as que entregaron asistencia de primeros auxilios durante las manifestaciones, denunciaron ataques directos con perdigones y gases lacrimógenos por parte de Carabineros mientras se encontraban atendiendo a personas heridas, aun cuando contaban con las identificaciones que permitían distinguirles a distancia», denuncia el documento.
El INDH presentó hasta la fecha nueve querellas por los delitos de apremios ilegítimos (cinco), torturas (tres) y lesiones gravísimas (una) que afectaron a personas que prestan primeros auxilios en las manifestaciones.
También computó 473 querellas por torturas y tratos crueles por parte de Carabineros, miembros de las Fuerzas Armadas y funcionarios de la Policía de Investigaciones.
Al 30 de noviembre, el INDH había presentado 96 querellas por torturas o tratos crueles con violencia sexual: las víctimas ascienden a 135, de las cuales 71 son mujeres (53%) y 64 son varones (47%).
Las principales violaciones de derechos se produjeron durante la vigencia del estado de excepción constitucional, que comenzó a regir entre el 19 y 22 de octubre, según la región, y se derogó el 27 de octubre.
Las protestas en Chile comenzaron el 18 de octubre a raíz del aumento de la tarifa del transporte público.