Por Enrique Genovar
Muchas cosas por definir. Muchas cuestiones a dilucidar. Muchos conceptos a plasmar. Mucha preparación física por hacer. Muchas cosas. Es que para jugar por un objetivo tan importante hay que prepararse. Y Diego Cocca tiene como cómplice al tiempo. Muchos días por delante. Muchas sesiones de entrenamientos. Y este cómplice esta vez es necesario, es un cómplice “bueno”, de esos que hacen falta.
Serán casi dos meses de pretemporada. Una pretemporada que tendrá como norte llegar de la mejor manera a un semestre que promete ser intenso. Y esa intensidad que tendrá lo que vendrá marcará si el Canalla es merecedor de continuar en la máxima categoría del fútbol argentino.
El trabajo comenzó sin caras nuevas y con muchos jugadores. Serán muchas las situaciones que deberán resolver el técnico y la dirigencia para comenzar a definir el plantel. Los próximos días serán vitales para conocer quiénes conformarán el plantel principal y quiénes no. Además el tema de los refuerzos no es menor. Cocca se mostró contemplativo con la situación económica del club y eso es una señal de alineamiento entre el entrenador y el club. Una buena señal.
Es que el Canalla hace rato que no vende por buen dinero y esto se sabe que pone flaca cualquier tesorería. El DT entendió el momento y de aquella primera lista con nombres interminables, hoy quedan pocos. Y lo más importante para que esos gustos se hagan realidad es que son nombres “terrenales”. Tal vez la mayoría de ellos no irradien jerarquía, pero son los que el director técnico también pidió y los que puede traer hoy el club.
Muchas situaciones. Muchas cuestiones que deben ser solucionadas. Pero el tiempo juega a favor. Y saber aprovecharlo asoma como uno de los principales desafíos a corto plazo que tiene el “Mundo Central” por delante.