El fiscal Carlos Rívolo estimó hoy que la causa de los cuadernos, que investiga una presunta trama de corrupción vinculada a la obra pública durante el Gobierno anterior, y por el que está procesada la ex presidenta Cristina Kirchner, podría ser elevada a juicio oral en «el segundo semestre del año que viene».
«Periodísticamente se habla de dos meses, no sé de dónde salió el anticipo. Hay mucho para analizar, pero esto puede tratarse en un juicio oral sobre el segundo semestre del año que viene», evaluó.
En comunicación con por radio Cooperativa, se refirió a la simultaneidad que tendría ese juicio con el desarrollo de la campaña electoral, que en este caso podría perjudicar las chances del kirchnerismo.
«Si pensamos en tiempos electorales paralizamos la Justicia, porque cada dos años estamos votando algo», argumentó Rívolo, quien junto a Carlos Stornelli integra el equipo de fiscal del juez federal Claudio Bonadio.
El funcionario judicial insistió en que «para la segunda etapa del año que viene podría llegar a haber un juicio oral» sobre la llamada «causa de los cuadernos».
En tanto, destacó que las pocas chances de que en el Senado avance el pedido de desafuero de Cristina Kirchner a raíz de la llamada «doctrina Menem» que sostiene el bloque del PJ comandado Miguel Pichetto «no es un impedimiento» para que la investigación prosiga en tiempo y forma.
«La realidad es que la investigación avanza, las investigaciones siguen hacia adelante y esto no es un impedimento», indicó en alusión al bloqueo que el Senado opone al eventual nuevo pedido de desafuero de Bonadio por considerar debe mediar sentencia firme para proceder en ese sentido.
Por otra parte, Rívolo salió en defensa de la figura del arrepentido sancionada por ley a fines del 2016 y puesta en práctica en el marco de esta causa por presunta corrupción con la obra pública.
«Se nos ha hecho muy difícil investigar la corrupción con las viejas reglas. Un cohecho no te lo probaba si no había una filmación, era extremadamente difícil», recordó, rechazando las críticas que la figura del arrepentido cosecha.
Al respecto, señaló que este sistema es «una gran oportunidad de negociación con la persona que se quiere arrepentir» y que «estos tipos de acuerdo son para dar una respuesta más rápida a la Justicia».