Luego de que anoche surgiera la información de que dos comisarios de la Policía de Investigaciones (PDI) habían sido detenidos por supuestas vinculaciones con la estructura delictiva que comandaba Esteban Alvarado, a quien se le atribuye un papel relevante en distintos negocios delictivos en la zona de Rosario, durante las últimas horas del jueves y las primeras del viernes se sumaron dos aprehendidos más: una mujer policía y otro efectivo.
Los apresados en primera instancia fueron el jefe operativo de la PDI Martín Rey y su hermano, Marcelo Rey, quien es su principal ayudante. Durante las últimas horas del jueves se detuvo a Jorgelina C. y esta madrugada a Pablo B., un agente de la PDI que hasta hace unos meses estaba afectado al Ministerio Público de la Acusación como apoyo a fiscales para distintas investigaciones, sostuvieron fuentes policiales.
Este último efectivo fue apresado por la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) en la terminal de ómnibus durante la madrugada de este viernes.
Mientras avanza la investigación sobre los nuevos detenidos, trascendió que los hermanos Rey serían colaboradores de Alvarado, quien está detenido desde febrero pasado por haber planificado el asesinato de Lucio Maldonado, el prestamista que estuvo secuestrado en noviembre en una quinta de propiedad del hombre de 43 años y luego apareció ejecutado a 200 metros del casino City Center, en la zona sur de la ciudad. En ese momento, Alvarado cumplía, ya en libertad, la última parte de una condena a 7 años como jefe de una organización de ladrones de autos.
En la última audiencia realizada por el caso de Maldonado, los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra señalaron que el apresado tiene conexiones con el narcotráfico.
Se trata del segundo golpe fuertes a las altas esferas de la PDI en el último tiempo, ya que en noviembre se encontraron vínculos entre Alvarado y el comisario Javier Makhat, que era hasta ese momento jefe de Inteligencia del Área de Drogas de la PDI.