La sequía es detectable a simple vista con el caudal ampliamente reducido. La maravilla del mundo alcanzó en este mes su mínimo histórico en 15 años.
Desde hace más de un mes, una bajante histórica afecta directamente a las Cataratas de Iguazú. Sin lluvias en la región y con el cierre de las compuertas de las represas brasileñas, la situación es particularmente grave. El Parque argentino se encuentra cerrado por la pandemia hasta nuevo aviso.
Este es uno de los peores escenarios de la historia de esta maravilla. La sequía es detectable a simple vista con el caudal ampliamente reducido. El Intendente del Parque Nacional Iguazú, Sergio Acosta aseguró que «la última vez que se dio algo así fue en 2005».
Caudal normal:
https://www.instagram.com/p/B3QFL1kAz-Y/
En este 2020, las Cataratas llegaron a su mínimo histórico en 15 años. El caudal normal es de 1.500 metros cúbicos por segundo, ahora es equivalente a 289 metros cúbicos. Acosta remarcó: «Esto también está influenciado por las 7 represas que este río tiene aguas arriba del lado brasileño que, cuando cierran sus compuertas, influyen aún más en la bajante», añadió.
Caudal actual:
https://www.youtube.com/watch?v=GH2QBiZNg4s&feature=youtu.be
https://www.instagram.com/p/B-YJBjcAmlt/
El río Paraná está en una de sus bajantes más grandes. Las consecuencias de la falta de agua se pueden detectar en todo el trazo del río. Salieron a la luz bancos de arena, embarcaciones hundidas y hasta se ve la manta protectora del túnel subfluvial que une las capitales de Entre Ríos y Santa Fe.