Los delincuentes causaron destrozos y robaron diversos elementos de valor, incluyendo cables, estufas, garrafas, cochecitos, alimentos y placas de bronce.
Cuatro instituciones educativas -tres escuelas y un jardín de infantes- fueron vandalizadas este fin de semana, resultando en la suspensión de clases para cerca de mil estudiantes. Los delincuentes causaron destrozos y robaron diversos elementos de valor, incluyendo cables, estufas, garrafas, cochecitos, alimentos y placas de bronce.
En la madrugada del domingo, un grupo de delincuentes ingresó al jardín de infantes “Caperucita Roja” en Villa Gobernador Gálvez, robando alimentos, garrafas y estufas, y utilizando cochecitos como carretillas para transportar los objetos sustraídos.
Durante la noche del domingo al lunes, ladrones ingresaron a la escuela “Joaquín Argüelles” en Pampa 6549, donde se llevaron griferías de los baños, placas conmemorativas y carteles nomencladores de las aulas.
En la escuela 1095 “Dr. Luis Chorroarín”, en Junín y México, robaron los cables de electricidad, dejando al establecimiento sin energía ni agua, lo que inhabilitó el uso de los baños y la preparación de comidas calientes para los estudiantes.
Finalmente, la escuela “Martin J. Thompson” en Presidente Perón al 5100 fue atacada con destrozos en tres aulas, el techo y el quiosco.
Gabriela Fernández, vicedirectora de la escuela “Dr. Luis Chorroarín”, relató cómo los ladrones arrancaron los cables de la columna hasta el pilar, cortando toda la línea trifásica. La directora, Maribel Bonacchi, exigió custodia policial para la escuela, destacando la imposibilidad de brindar comidas calientes y la inactividad escolar.
En la escuela “Joaquín Argüelles”, los delincuentes se llevaron todos los elementos metálicos que pudieron extraer. Los ladrones accedieron al colegio a través de los techos de las casas vecinas. Una profesora informó que se dio aviso al 911 y que intentan habilitar la escuela para el turno tarde.
La vicedirectora de la escuela “Martin J. Thompson” reportó que los ladrones causaron destrozos en tres aulas del piso superior, el techo y el quiosco. La policía intervino y se radicó la denuncia correspondiente.
En el jardín de infantes “Caperucita Roja”, las cámaras de seguridad captaron a un hombre ingresando al establecimiento y apagando las cámaras antes de revolver armarios y cajones. Los ladrones robaron alimentos, garrafas y estufas, impidiendo el regreso a clases de los niños el lunes.