Según informó el diario Perfil, el delantero y capitán de Boca, Carlos Tevez, fue socio de los Macri en el negocio de los parques eólicos. El futbolista tuvo el 10% de las acciones de Sideli SA, una de las compañías de la familia presidencial.
La Justicia investiga a dicha firma por supuestas negociaciones incompatibles y defraudación a la administración pública.
Las sociedades de Macri y sus socios debieron presentar documentación, que incluye balances comerciales y actas de directorio, ante la Inspección General de Justicia (ICJ), que investiga si la firma se vio favorecida por el propio poder ejecutivo, obteniendo seis contratos sin licitación previa. Dichos documentos fueron presentados con un año y medio de demora tras la intimación judicial y oficial.
La investigación está a cargo del juez federal Marcelo Martínez de Giorgi y se originó a raíz de una denuncia del diputado del Frente Para la Victoria Rodolfo Tailhade. Según asegura Perfil, De Giorgi ordenó levantar el secreto fiscal de Gianfranco Macri.
Los informes que presentó la firma constatan que Tevez era dueño del 10% de la empresa, mientras que el resto de las acciones estaban a nombre de la principal compañía de la familia presidencial, Sideco (15%), de Helios Partners (9%) y la sociedad Usir Argentina SA (66%).
El jugador de Boca mantiene una conocida amistad con el presidente y con su hombre en Casa Amarilla, Daniel Angelici.
Según expresa el diario, los Macri y sus socios obtuvieron en 2016 seis contratos sin de parques eólicos sin pasar por licitación pública y luego los revendieron obteniendo una ganancia millonaria.
Sideco creó cuatro sociedades anónimas entre diciembre 2015 y marzo de 2016, Sidsel, Sideli, Usir Argentina y Parque Eólico Miramar SA. Payaslián, contador de Sideco, había creado la firma Parque Eólico Miramar ocho meses antes de que la licitación quedara en manos de Isolux y luego de Sideco.
Durante 2016, los Macri y sus socios adquirieron seis proyectos a la empresa española Isolux. Si bien la compra-venta de este tipo de contratos está permitida hay un detalle a analizar. Isolux había vendido cuatro de los contratos, y anunciaba su retiro del mercado argentino. Sin embargo, volvió a ganar dos licitaciones más. Esos contratos eran de Sideco y sus sociedades.
El grupo pagó a Isolux poco más de 25,8 millones de dólares por los seis parques eólicos. Unos meses después, los revendió a Goldwind, empresa china, y a Genneia por 95 millones de dólares, una ganancia de 69,2 millones.
En Sideco aseguran que debieron desprenderse de los parques tras el escándalo del caso Correo Argentino SA.