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Cáritas Argentina recibió 100 mil euros para una «iniciativa innovadora» en barrios vulnerables


Se trata de una ayuda económica especial para una iniciativa que se desarrolla en Añatuya, Formosa, Mar del Plata, Comodoro Rivadavida y Río Gallegos

Cáritas Argentina recibió una «ayuda económica especial» de 100.000 euros de parte de Cáritas Internationalis por una «iniciativa de cuidado de los más vulnerables» consideradas «novedosas por ser preventivas y por valorar el trabajo comunitario», se indicó en un comunicado de prensa.

Esa iniciativa se lleva adelante en comunidades de las ciudades de Añatuya (Santiago del Estero), Formosa, Mar del Plata, Comodoro Rivadavia y Río Gallegos.

«A partir de la declaración de emergencia por la pandemia de Covid-19, Cáritas Argentina debió reorganizar muchas de las acciones que lleva adelante para dar respuesta a las problemáticas sociales de las comunidades excluidas y personas en situación de pobreza del país», explicó la organización.

Cáritas señaló que «en el caso de los Centros Barriales, dedicados al acompañamiento y ayuda a personas con problemas de adicciones, se adaptaron los espacios y se capacitó a residentes para atender a las necesidades de cada comunidad».

También «se crearon lugares de aislamiento preventivo para que puedan vivir allí personas de riesgo, se realizó un relevamiento para detectar ancianos a los fines de acercarles alimentos y atención médica».

«Ante esta nueva situación salió lo mejor de nosotros. En cada paraje, localidad, barrios y ciudades en estos meses hemos ampliado el campo de atención de vulnerabilidades», reflexionó monseñor Roberto Álvarez, Obispo Auxiliar de Comodoro Rivadavia, en una reunión virtual con los participantes del proyecto

Y amplió: «Aprendimos que a un adulto mayor hay que resguardarlo del virus, pero también de la fila interminable de un banco; del desasosiego de no saber hacer las compras online, o de la soledad de no tener con quien conversar».

Actualmente, Cáritas acompaña a 180 Centros Barriales en todo el país que ayudan a unas 1800 personas y sus familias, articulando la actividad «con organizaciones civiles y organismos municipales, provinciales y nacionales, como por ejemplo la Sedronar que desde hace varios años apoya el trabajo de este modo de abordaje, a través del programa Casas de atención y acompañamiento comunitario».