El letrado consideró que lo ocurrido después fue “un accidente de tránsito”
El abogado de Carolina Píparo, Fernando Burlando, consideró hoy que no se debe «perder el foco más importante, que fue un episodio de inseguridad» sufrido por la legisladora bonaerense, al considerar que lo ocurrido después, cuando el esposo de la mujer embistió a dos motociclistas a los que creyó delincuentes, fue un «accidente de tránsito».
Sobre el pedido formulado esta mañana por el abogado de los jóvenes atropellados, Marcelo De Vargas, quien solicitó la detención del marido de Píparo, Juan Ignacio Buzali, Burlando consideró que se trata de una medida «un poco alejada de la cordura que impone el derecho» en un episodio que «está muy claro».
«Hay dos situaciones diferentes: una de las situaciones tiene que ver con lo más importante, el primer hecho de robo calificado que hace victima a Carolina Píparo, quien vivió hace diez años el episodio más trágico de similares características que le tocó vivir», recordó el letrado en diálogo con TN, al referirse a cuando la ahora diputada fue atacada a balazos por motochorros y perdió a su bebé de nueve meses de gestación.
Sobre el episodio posterior al asalto ocurrido la madrugada del último Año Nuevo, en el que el esposo de Píparo embistió con el auto a dos motociclistas, Burlando dijo que es un hecho de «lesiones leves que por suerte no terminó en tragedia» y aseguró que no hay «nada mas alejado» que pensar que Buzali tuvo «intención de matar».
«Cualquier intención que hubiese tenido el conductor la hubiese logrado -ya que iba en un auto y embistió a una moto- y lo ocurrido puede tener que ver con una situación de impericia o negligencia», agregó.
En tanto, en diálogo con C5N, Burlando insistió que se trató de una «mala conducción» y que no hay «ningún justiciero».
«La Justicia investigará cómo se provocaron las lesiones del ciudadano que iba en motocicleta. Buzali jamás fue en búsqueda de nadie. Estaban conversando con el 911. Ellos entendían que podían tener vínculo con el robo inicial; querían que fueran identificados, no hay ningún justiciero», expresó.
Sobre el test de alcoholemia practicado a Buzali y cuyos resultados aún aguarda la fiscalía, el letrado consideró que «lo más importante es el diagnóstico clínico».
En este sentido, indicó que «una persona que consumió, muestra alteración» y, en este caso, «estaba todo dentro del ámbito de la normalidad».
«Buzali no hacía alarde de haber consumido alcohol y no había sintomatología de haber consumido alcohol», indicó Burlando.