Los refugios se construyen con todas las comodidades para poder vivir por un año ante un posible "fin del mundo". Con el coronavirus, aumentó la demanda
Búnkeres subterráneos, con puertas blindadas, y con comodidades para «sobrevivir» por unos meses, o incluso un año. Así son los refugios que muchos se construyen ante un posible fin del mundo o, siendo menos drásticos, para sobrellevar una catástrofe. En Estados Unidos, dos hombres fundaron compañías que se especializan en este tipo de estructuras y que en tiempos de pandemia, aumentaron sus consultas.
Así lo explicaron Larry Hall y Robert Vicino a la BBC, en una entrevista donde remarcaron que la demanda de sus complejos de lujo se disparó por el miedo que causa el coronavirus y afirmaron recibir muchas más llamadas al día de compradores interesados.
Las estructuras son, en su mayoría, subterráneas, selladas con puertas blindadas de acero y con todas las comodidades posibles.
Desde Survival Condo, la empresa de Hall, indicaron que ahora los clientes compran sin siquiera organizar una visita física a las instalaciones.
Aunque hay muchas consultas, pocos pueden concretarlas por su alto costo. Vivos, la compañía de Robert Vicino, ofrece mini búnkeres a partir de US$40.000. En Survival Condo, por otra parte, se anuncian búnkeres más lujosos por precios que alcanzan los US$4,5 millones.
«Son búnkeres nucleares de lujo que están diseñados para proporcionar no sólo protección física, sino también bienestar mental», aseguraba Larry Hall, dueño de Survival Condo, en una entrevista con la BBC en 2017.
https://www.youtube.com/watch?v=0D4EN-jFb4U&feature=youtu.be
También explicó que había gastado millones de dólares para dotar a las viviendas de las características necesarias para residir en ellas por un largo período de tiempo. Entre estas, sistemas de filtración de agua y aire, fuentes de energía alternativas, piscinas, salas de cine, salones de cirugía y, por supuesto, guardias custodiando las entradas.
Video: siete búnkeres lujosos
Las instalaciones de los búnkeres cambian de acuerdo a los pedidos de los clientes, y a las necesidades de cada uno en base a la utilidad que podrían darle.
Piletas, gimnasios, y teatros, por ejemplo, son algunas de las comodidades de los más lujosos. Incluso, a prueba de balas.
Mirá el video de Víctor González donde muestra siete búnkeres de lujo para sobrevivir: