Dani Alves, icónico marcador lateral derecho de Barcelona, donde ganó 23 títulos junto al rosarino, hoy juega en San Pablo, aunque reconoció su fanatismo por el Xeneize: "La gente sabe el cariño que tengo por Boca"
El lateral derecho del San Pablo de Brasil Dani Alves abrió la puerta a una posible llegada a Boca al afirmar que «no estaría mal» jugar en el Xeneize y que la gente «sabe el cariño» que tiene por la institución argentina.
«La verdad que no estaría mal, la gente sabe el cariño que tengo por Boca. Y normalmente no es porque la gente dice: Boca, es un grande y bla bla bla «, manifestó el brasileño en una transmisión en vivo a través de la red social Instagram.
Y añadió: «Siempre ha sido porque me despertó algo diferente. Hay algunas situaciones que te identifican con ellos, me pasó como cuando fui a Barcelona».
Nacido en el nordeste, en el pobre estado de Bahía -de ahí su sobrenombre de Vampiro Baiano-, Dani Alves jugó en las categorías inferiores del Bahía, donde debutó como profesional en 2001, pero al año siguiente fue cedido al Sevilla, donde explotó como jugador y consiguió cinco títulos (entre ellos dos Copas de la Uefa).
Internacional absoluto desde 2006, con la que ganó dos Copas América y dos Copas Confederaciones, Alves jugó ocho años en el Barcelona (2008-2016), el punto álgido de su carrera, junto a Messi y Neymar, entre otros.
Con el club azulgrana, ganó 23 títulos (entre ellos tres Ligas de Campeones y seis ligas).
Después, pasó un año en la Juventus, con el que ganó el Scudetto y la Copa de Italia, y perdió la final de la Liga de Campeones con el Real Madrid.
Con el París Saint-Germain ganó cinco títulos en dos temporadas, entre ellos dos ligas y una Copa de Francia, hasta que luego llegó al San Pablo de Brasil.