El secretario General del Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario analizó la situación de los trabajadores a días del próximo paro de la CGT
Los trabajadores argentinos transitan momentos de tensión enmarcados por las discusiones en el Congreso en torno a la Ley Bases. En el medio, desde la administración nacional continúan con los despidos y los gremios se mantienen en alerta y fuerte rechazo a las políticas que lleva adelante el Presidente, mientras pasó el primer Día del Trabajador bajo la presidencia de Javier Milei. “La verdad que el 1° de mayo fue un día con sensaciones encontradas, un día de reflexión, un día donde estuvimos movilizados en conmemoración, pero también movilizados contra este tipo de políticas que atentan contra los derechos de las trabajadoras y de los trabajadores”, dijo a CLG Alberto Botto, titular del Movimiento Sindical Rosarino (MSR) y secretario General del Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario.
“Lo que pasó con la Ley Bases generó mucha angustia y bronca porque contiene una reforma laboral retrógrada. Cualquier reforma tiene que mejorar la calidad de vida de los que vamos a trabajar día a día, por eso esperamos que el Senado proteja a los más vulnerables”, agregó.
Para Botto, el gobierno de Milei mostró “mucha insensibilidad” y “benefició a sectores minoritarios y concentrados de la economía”. En este sentido, sostuvo que la administración nacional basó su discurso en “escenarios que eran imposibles que ocurran, como un 17 mil por ciento de inflación, y así logró la quita de subsidios o el aumento del costo de vida”.
“Si en la Argentina había cosas que estaban mal, había que corregir, pero empeorarla de esta manera le va a costar mucho al pueblo”.
El titular del MSR planteó que no se puede ahorrar, que se licuaron los salarios y que, a costa de “hacer creer que teníamos un Estado ineficiente”, se quitaron subsidios en los servicios y transporte. Bajo esta premisa se preguntó: “¿Dónde está toda la plata que recortaron? La están usando para pagar a organismos internacionales amigos de los que hoy están en el gobierno”.
“Nuevamente el pueblo ha sido víctima de una promesa electoral donde teóricamente este brutal ajuste no lo iba a pagar la gente, le iba a pagar la casta política, pero bueno, era obvio que el gran esfuerzo iba a salir del pueblo y fundamentalmente está saliendo de los jubilados. Esto no nos va a conducir a una buena salida, a un buen destino, no vamos a salir fácil de esto, va a costar realmente mucho”, sentenció el secretario General de Luz y Fuerza Rosario.
Botto mencionó también los despidos generales en las empresas del Estado, como los recientes en Correo Argentino, siendo 26 cesanteados en la región de Rosario. Sin embargo, remarcó que también suceden en el sector privado: “A nivel país está empezando a haber también suspensiones o despidos y hay muchos que no se notan, comercios que no pueden seguir por el alto costo de los servicios, eso genera también un goteo que es difícil de percibir, donde se van perdiendo muchas fuentes de trabajo. La verdad es que el panorama es bastante desolador”.
En esta línea, citó al actual secretario de Trabajo del Ministerio de Trabajo de la provincia de Santa Fe, Julio Genesini, quién reveló datos de la cartera laboral: sólo en Santa Fe se firmaron suspensiones para 10 mil puestos de trabajo en el sector privado.
Por último, Botto bregó por un país que “funcione, produzca y tenga buenos salarios” y por un Estado que ejerza “control y presencia marcándole a los formadores de precios que no pueden estar aumentando bajo ningún tipo de justificación”.
El próximo jueves 9 de mayo la CGT a nivel nacional llamó a un paro nacional, el segundo desde que Milei llegó a la Casa Rosada. Si bien no habrá movilización central, en Rosario aún no se definió si se realizará un acto o marcha por las calles de la ciudad.