El país sigue transitando por una compleja realidad económica y, por decantación, también social. El último viernes el dólar volvió a coquetear con los 30 pesos y la inflación continúa su rumbo ascendente. Mientras tanto, la UCA percibió otro aumento de la pobreza en Argentina, que superaría (y por varios puntos) el 30%.
Ante este escenario, CLG dialogó con Alberto Botto, titular del Movimiento Sindical Rosarino y secretario general del Sindicato de Luz y Fuerza de Rosario, quien no dudó en advertir que “a este Gobierno se le ha ido claramente el plan económico de las manos”.
“El presidente salió hablar de la inflación con una cifra que, además de duplicar la que había previsto, también está fuera de la realidad, porque se está quedando corto. Ya hay quienes prevén que para fin de año se llegará al 40%”, indicó.
“Obviamente que, en caso de que no se respeten las recomposiciones salariales a través de las paritarias y las cláusulas, se presagian escenarios de mucho conflicto. La crisis está pegando duro, y eso ya no es una novedad para el sector popular y de los trabajadores”, continuó el líder sindical.
Consultado sobre la calidad de vida de los argentinos, Botto aseguró que la misma ha “disminuido considerablemente y sigue en caída”. “Los aumentos en los servicios, combustibles y alimentos están atacando constantemente al bolsillo de los trabajadores”, apuntó.
“Los representantes de comerciantes y de pymes recalcaron que para ellos la inflación, sólo en el primer semestre de 2018, fue del 25%. Los números que está dando el Gobierno nacional están muy alejados de la realidad y, por supuesto, en la clase trabajadora todo eso se siente mucho más”, esgrimió el dirigente gremial.
Asimismo, continuó: “Cada vez empeora más esta situación. Hay aumentos exponenciales en las tarifas y se le hace muy difícil a la gente. Hay restricción en el consumo y, cuando eso pasa, se resta calidad de vida”.
“Y del otro lado, también sucede lo mismo. En la industria, al no haber consumo, hay pérdida de puestos de trabajo o reducciones de jornadas laborales. Todos los indicadores de la economía siguen dando mal y no se percibe ninguna modificación en ese aspecto”, resaltó.
“Lo que nosotros habíamos presagiado con el Movimiento Sindical Rosarino, denunciando que nunca iban a llegar los brotes verdes del segundo semestre, se cumplió. Se sigue pateando la pelota para adelante y, para colmo, tenemos el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que sin dudas es algo lapidario para todo el pueblo argentino”, enfatizó Botto.
En referencia al panorama que avizora de cara a las elecciones de 2019, expresó: “Claramente el Gobierno nacional va a sufrir las consecuencias de todas las promesas no cumplidas. Ese descontento se va a manifestar en las urnas”.
“También es necesario exigirles a todos los sectores que pensamos parecido una unidad en la acción, con la finalidad de derrotar a este modelo económico que tantos males ha traído a la sociedad”, finalizó.