El candidato a gobernador por el Frente Progresista dialogó mano a mano con CLG a menos de 20 días de las elecciones donde buscará suceder a Miguel Lifschitz
Con esa cordialidad que forma parte de su naturaleza, el candidato a gobernador por el Frente Progresista, Antonio Bonfatti, recibió a Con La Gente Noticias (CLG) en su oficina privada, espacio que no hace alarde de lujos ni paqueterías. Un escritorio, un par de muebles y el aire minimalista se respira en el lugar por todas partes. Acaba de grabar varios spots publicitarios, pero no se lo ve cansado, y con una sonrisa afable recibe a CLG.
La entrevista tiene un preludio, una charla previa y durante la misma el dirigente da algunas pistas: “El socialismo y el Frente Progresista siempre -dice hablando de la posible participación de otras fuerzas políticas en su posible gobierno- estuvieron abiertos a gente de otros espacios políticos, Chiqui González (ministra de Cultura) por ejemplo, es peronista”. En ese sentido, el actual presidente de la Cámara de Diputados, ya durante el reportaje, dijo que «puedo hablar por decenas, y tal vez centenares, de personas que han sido partícipes de mi gobierno y que no han pertenecido a mi partido».
Bonfatti sostuvo que la pobreza hace que unos pocos elijan el delito como forma de resolver ese problema y «eso es lo que nosotros queremos combatir generando trabajo con apoyo financiero de la provincia». Asimismo, acordó con la propuesta de llegar a una gran concertación nacional entre todas las fuerzas políticas para conseguir salir de la crisis. “Es necesario que nos pongamos de acuerdo de una vez por todas y que primen las políticas del Estado. La profundidad de la crisis amerita que encontremos un camino de diálogo sin divisiones entre los argentinos, donde nos propongamos metas de coyuntura, pero fundamentalmente metas a mediano y largo plazo”, expresó.
—Durante mucho tiempo algunos sectores calificaron al Frente o al socialismo como «narcosocialistas». La verdad es que tal calificación se acaba de derrumbar cuando se descubrió, hace pocos días, que el falso abogado Marcelo D’Alessio pedía a un narco detenido que prestara declaraciones perjudicando a la estructura socialista. De alguna manera, ese término que se acuñó durante mucho tiempo, ¿influye en esta elección?
—No ha sido solamente ese el caso. Hubo otros episodios, no solamente ese, en los que se descubrió que eran acusaciones falsas para dañar la imagen del Frente Progresista o de algún candidato del Frente. Y alguno lo podrá creer, porque cuando uno larga una mentira e insiste, siempre alguien lo toma como cierto. Ya lo decía el ministro de propaganda de Hitler: «Miente, miente, miente que algo quedará». Por suerte, cuando empezó todo esto y yo era gobernador, recibí un espaldarazo de 765 mil votos. Esas cosas siempre hacen daño en lo personal, porque uno ha combatido contra organizaciones delictivas y esto pareciera que es el país del revés. El que pone presas a estas organizaciones pasa a ser el victimario y no la víctima. Cuando les pateamos el hormiguero a las organizaciones, nos picaron algunas hormigas. Lamentablemente en la política hay estas bajezas, aunque con el tiempo se terminan aclarando.
—Se habla demasiado de inseguridad, pero no se explican algunas cuestiones, por ejemplo las causas. ¿Cuál es la causa de la inseguridad?
—Nosotros hemos hecho mucho para combatir el delito. En primer lugar, dotando a la policía de recursos necesarios, como los tecnológicos, y de reconocerles su sueldo en blanco y no como se hacía anteriormente, que se les pagaba con una parte no remunerativa. También hemos hecho mucho por cambiar la justicia penal en Santa Fe, pero hay causas que tienen una enorme profundidad. Me refiero particularmente a que el 50 por ciento de nuestros niños y jóvenes están por debajo de la línea de la pobreza. Hemos puesto presas a las organizaciones delictivas más connotadas, pero a veces nos preguntamos: ¿qué hace un joven que no tiene posibilidades de estudiar o trabajar? ¿Qué hace con su vida? No es que la pobreza genere delito, pero indudablemente algunos pocos eligen la marginalidad y eligen el delito como una forma de resolver su vida desde el punto de vista económico. Esto es lo que nosotros queremos combatir. Como propuesta de gobierno, yo estoy proponiendo generar trabajo e incentivar la producción con apoyo financiero de la provincia. Hemos garantizado los derechos básicos, tales como salud y educación durante todos estos años, que no han sido inversiones menores. Ahora, el gran flujo de dinero del Estado tiene que estar para apoyar al sector productivo y quitarle al delito las bases de sustentación.
—Pero ni Santa Fe ni ninguna provincia del país puede resolver el problema económico, un asunto que es de índole nacional.
—Por supuesto que no podemos resolver la macroeconomía, pero somos capaces de dar respuestas. ¿Quién construyó diez hospitales, acueductos en toda la provincia, miles de kilómetros de ruta, edificios de cultura? ¿Quién tiene el Plan Abre en el país? ¿Quién tiene la mejor educación pública de la Argentina? Entonces, uno puede direccionar el presupuesto hacia un lado o hacia otro. Y no robar, no hacer corrupción en el ejercicio de la función pública. Estamos dispuestos a seguir sosteniendo nuestro accionar con los derechos, pero insisto es hora de generar trabajo y producción.
—Los argentinos vivimos hoy, lamentablemente, en el marco de esto que se llama «la grieta», una perniciosa división. Si es gobernador, ¿usted contempla la presencia de extrapartidarios en el gabinete provincial?
—Los hemos tenido y los seguiremos teniendo. Nunca hemos otorgado a un funcionario un cargo en el gobierno por la calidad de afiliado o no a un partido. Lo hicimos por su saber y por su saber gestionar. Puedo hablar por decenas, y tal vez centenares, de personas que han sido partícipes de mi gobierno y que no han pertenecido a mi partido.
—En consonancia con esto y pasando al plano nacional, ¿está de acuerdo con una gran concertación nacional para salir de la crisis en que se encuentra el país?
—Es necesario que nos pongamos de acuerdo de una vez por todas y que primen las políticas de Estado. La profundidad de la crisis amerita que encontremos un camino de diálogo, sin divisiones entre los argentinos, en donde nos propongamos metas de coyuntura y, fundamentalmente, metas a mediano y largo plazo.
—Un sector social, que muchas veces no es tenido en cuenta y que evidentemente tiene mucha fuerza, energía y con frecuencia mucho talento, es el de la juventud. ¿Lo contempla en su estructura de gobierno?
—Durante mi gobierno implementé el plan Vuelvo a Estudiar. Recuperamos a 43.500 jóvenes que habían abandonado la escuela secundaria. Después siguió el Vuelvo a Estudiar Virtual, que daba la posibilidad de hacerlo vía informática. El Plan Nueva Oportunidad, que le da a los jóvenes la posibilidad de hacer oficios, ya tenemos 12.500 ahí. El Gabinete Joven, en donde cada ministro tenía la obligación de sumar jóvenes para que vayan haciendo experiencia en lo que es gobernar. También, decenas de programas culturales. Y vuelvo a insistir en que tenemos que poner énfasis en la generación de empleo para la juventud.
—¿Por qué debería votarlo un peronista, o alguien que anteriormente votó a Cambiemos, por ejemplo?
—Nosotros propusimos, cuando comenzamos la gestión del Frente Progresista junto a Hermes Binner, un plan estratégico. O sea, un libro en donde están escritos todos los proyectos que íbamos a realizar. Y hemos cumplido. Se los podemos mostrar. Entonces, tenemos palabra. Cuando decimos que somos lo que hacemos, es porque podemos demostrar todo lo que hemos hecho en todos estos años. Nunca le vendemos buzones a la gente ni hacemos política con empresas de publicidad con eslogan. Siempre le ponemos contenido a las cosas. Hospitales, escuelas, rutas, acuerdos, tejer lazos en la sociedad, el Plan Abre… todo esto que planteamos lo hemos ejecutado, porque somos gente confiable. Tenemos 30 años de gobierno en Rosario y tenemos 12 en la provincia de Santa Fe. No hay un sólo hecho de corrupción denunciado. Por eso, yo los invito a acompañarnos para un nuevo período de gobierno.
—¿En qué punto va a poner énfasis si es gobernador de la provincia?
—En garantizar lo conseguido, que son los derechos, en cambiar la matriz productiva de la provincia y en generar trabajo. Eso se hace con financiamiento por parte del Estado al sector productivo existente o emprendedor, con subsidios de tasas. Pondremos 5 mil millones de pesos para el año que viene. Eso se logra acoplando al sector productivo el mundo científico, que hay mucho en Santa Fe. Tenemos que innovar y ser competitivos en el país y en el mundo. También se hace apoyando a la economía social, apoyando al hábitat, donde nos proponemos hacer 60 mil lotes urbanizados, y al turismo, que genera muchísimo empleo. Tenemos muchas cosas para ofrecer desde Santa Fe y poner la educación al servicio de una nueva forma de producir en la provincia. Todo esto también es movilizar a la sociedad en su conjunto.
Por C. D.