Tokyo 2020

«Biles no tomó dimensión de que es la Messi de la gimnasia», opinó Federico Molinari


El santafesino habló sobre la situación mental que atraviesa la gimnasta estadounidense Simone Bilesm, quien se bajó de competiciones para resguardar su salud mental

El gimnasta olímpico argentino Federico Molinari se refirió este lunes al caso de la estadounidense Simone Biles, quien mañana retornará a la competencia en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, y de la importancia de salud mental en el deporte de alto rendimiento.

«Biles no sé si tomó dimensión de que es la Messi o el (Michael) Phelps de la gimnasia. No es que subestimó la situación pero no hizo un trabajo específico en lo psicológico para poder soportar la presión», opinó Molinari, diploma olímpico en Londres 2012 y medallista de bronce en los Panamericanos de Lima 2019.

Por su parte, la coordinadora del Área de Psicología del CeNARD, Nelly Giscafré, aseguró que es imposible «predecir» que pasará mañana con Biles pero remarcó que el «trabajo mental» no se resuelve «de un día para el otro».

Ambos, en diálogo con Télam, analizaron el caso de la estrella estadounidense Simone Biles que se bajó de cinco pruebas durante los Juegos Olímpicos Tokio 2020 para preservar su salud mental y mañana retornará a la competencia para la final de barra de equilibrio que se celebrará en el Centro de Gimnasia Ariake.

Los Juegos Olímpicos de Tokio y el caso puntual de la gimnasta Simone Biles abrieron el debate sobre la salud mental de los deportistas de alto rendimiento.

Luego de ganar cuatro medallas de oro y una de bronce en los Juegos de Río 2016, Biles llegó a Tokio como la máxima estrella de la gimnasia artística pero su retiro en la prueba por equipos del pasado martes para proteger su salud mental fue una de las grandes sorpresas de la cita olímpica.

«Cuando tenía 16 años, quizás no sabía del rol que ocupaba en la gimnasia o le daba lo mismo, y ganaba. Ahora es más grande y empieza a entender lo que es ser una estrella mundial. Si no estás preparado te abruma y afecta», afirmó Molinari, uno de los máximos referentes del deporte olímpico argentino.

Federico Molinari

«Antes lo soportaba porque era ella y tenía resto físico y técnico. Ella tendría que hacer un trabajo psicológico y competir pero ahora no tiene tiempo, ya está en Tokio», agregó.

Luego de entrenarse los últimos días en un gimnasio en Tokio, Biles confirmó que estará mañana en la final de barra de equilibrio, prueba en la que ganó el bronce en Río 2016.

«Puede ser campeona olímpica sin problemas pero tiene que hacer su mejor serie, no tiene margen. Llevarse una medalla sería un logro, después de lo que está viviendo», destacó Molinari, quien dio su punto de vista sobre el caso de la estrella estadounidense.

«Creo que a ella no la puede abrumar la presión siendo la figura que es. Es lógico que haya presión sobre ella porque es una ídola mundial. Por éso, pienso que no estuvo preparada desde la parte mental. Se ocuparon de la parte física y no se fijaron en lo mental, que también se entrena», remarcó.

En este sentido, el gimnasta argentino puntualizó que este tipo de situaciones «suelen ocurrir» en este deporte «bajo situaciones de presión».

«Se te mezclan los ejercicios, pueden salir mal, te perdés en el aire, no sabes donde está el piso y eso puede producir una lesión. A todos nos pasó, es raro que pase en una competencia importante. A Simone la sorprendió en el medio de los Juegos y no lo pudo resolver», consideró.

Incluso, Molinari reveló que uno de sus alumnos vivió una situación similar antes de los Juegos Panamericanos y lo pudo resolver antes de la competencia con trabajo psicológico, algo que según su visión le faltó a Biles.

Nelly Giscafré es la coordinadora del Área de Psicología del CeNARD y convive diariamente con los «demonios», tal como los definió Biles a sus problemas, de los deportistas argentinos.

El alto rendimiento y cómo convivir con las presiones | Argentina.gob.ar
Nelly Giscafré

La licenciada aportó su mirada profesional del caso que conmocionó al deporte y coincidió en que esta edición será recordada como los «Juegos de la Salud Mental».

«El trabajo mental no (se resuelve) de un día para el otro. No sé qué motivó a Biles a volver a competir. Podría ser la presión de los medios, del país, de la familia…pero no se puede predecir que pasará», admitió Giscafré.

«Por presión, exceso de ansiedad o falta de confianza, se pierde el automatismo y los deportistas compiten en automático. Cuando viene el miedo, hacer esos saltos sin tener confianza de que va a salir, es terrorífico», puntualizó sobre el «bloqueo mental» o los «twisties» que sufre Biles cuando está en el aire.

«El bloqueo es la incapacidad de fluir. Biles dijo que no pudo con los demonios. No se reconocía más. Cuando el motor de la presión está sobre el de la pasión funciona como un autocastigo», añadió.

«Es muy importante tener un profesional formado y capacitado para que ayude a los deportistas. Argentina no llevó, no sé si Estados Unidos los tiene. El alto rendimiento no es saludable porque el riesgo del (deportista) quemado está siempre», afirmó.

El factor pandemia y la postergación de los Juegos Olímpicos también fueron claves para la salud mental de los atletas.

«Estos fueron los Juegos de la Salud Mental. Todo fue raro y no hay certezas. Eso es lo que tiene el alto rendimiento y el deporte en general», concluyó.