Se determinó que la carga original había partido desde General Deheza (Córdoba), pero fue “contaminada" en Rosario.
En los puertos de Santos en Brasil y Rotterdam en Países Bajos se dieron dos intervenciones policiales sobre barcos que partieron desde el puerto de Rosario. En los procedimientos se encontraron 1.434 kilos de cocaína entre los dos navíos. Luego de que fueran notificadas las autoridades de Rosario y Argentina se llevaron a cabo tareas investigativas que tuvieron como resultado tres personas detenidas, entre ellas dos transportistas y un empleado portuario. Mientras tanto, hay otros dos prófugos que son buscados.
La droga se escondía en bolsos colocados dentro de cargamentos de maní y según el parte oficial, los barcos salieron desde la Terminal Puerto Rosario S.A.
En el puerto de Santos el contenedor en cuestión fue sometido a un proceso de inspección que resultó en la «identificación de la presencia de volúmenes extraños superpuestos a la carga íicita de maní y que estaban acondicionados en varios paquetes con logos que fueron identificados como Supreme y Louis Vuitton, según se indicó.
En total son tres cargamentos que salieron de Rosario como un producto más. El primero fue interceptado en Santos y allí había 568 kilos de cocaína escondidos. Días después, en el puerto de Roterdam, se detectaron otros dos contenedores en los que había 866 kilos de cocaína más.
Tanto las autoridades brasileñas como las nerlandesas dieron el aviso a la Justicia federal argentina, que comenzó una investigación para dar con la trazabilidad de los cargamentos.
Así, una vez recibido el aviso sobre la actividad ilícita presunta en el Puerto de Rosario, la investigación local fue impulsada por el fiscal federal Nº 2, Claudio Kishimoto; el fiscal de la Procuración contra el Narcotráfico (Procunar), Diego Iglesias y el auxiliar judicial Matías Scilabra. Y las órdenes de allanamiento fueron libradas por el juez federal Carlos Vera Barros.
A partir de allí, se pudo determinar que la carga original había partido desde General Deheza (Córdoba), pero fue “contaminada» en Rosario.
¿Cómo se llegó a esa deducción? Los precintos de los containers fueron cambiados, ya que los mismos eran de distinto color. Es decir, alguien los abrió y colocó la droga adentro.
Los detenidos, dos transportistas y dos empleados que operan el puerto rosarino, «serán indagados durante la jornada de hoy», dijo el fiscal federal Claudio Kishimoto, a cargo de la investigación.
Según el funcionario judicial, «los detenidos presuntamente usaban puntos ciegos en el puerto de Rosario para evadir los controles e introducir la droga sin ser detectados».
«La maniobra se llama Rip-Off. Es el embarque de mercadería ilegal en una destinada legalmente a exportarse», explicó el fiscal Kishimoto en declaraciones a Cadena3-Rosario.
Para el funcionario federal, «la maniobra es típica de películas» y «usaron el cargamento de maní como pantalla».