Gaspar Duarte y Jaminton Campaz le dieron la victoria al equipo de Holan. Ever Banega descontó sobre el final
Se jugó el clásico rosarino. Una nueva edición del partido más importante de la ciudad no podía quedarse sin emociones. Y el primero en gritar fue Rosario Central.
A los 16 minutos la pelota parada le dio la primera alegría de la tarde con Gaspar Duarte llegando por atrás de todo. Revisión del VAR mediante, el juvenil canalla gritó el primero ante un Coloso que no salía del asombro.
El partido continuó como todo clásico. Trabado, disputado y más hablado que jugado. Los equipos en el entretiempo intentaron ordenar sus líneas para los segundos 45 minutos.
Cuando Newell’s estaba jugando mejor, otro centro fue un puñal para la defensa leprosa. Malcorra lanzó y encontró a Carlos Quintana que la bajó para que Jaminton Campaz sorprenda a todos. El más chiquitito de la cancha ganó de cabeza y festejó.
Cuando el encuentro estaba entrando en sus últimos minutos, Ever Banega se hizo cargo de ponerle picante a la tarde. Tomó una pelota a 35 metros del arco de Jorge Broun y lanzó un disparo potente que pegó en la parte baja del palo derecho del arquero e hizo emocionar a todo el Marcelo Bielsa.