La Alta Comisionada de la ONU mostró preocupación por la continuación de combates
La Alta Comisionada de la ONU mostró preocupación por la continuación de combates
La Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, condenó «las muertes y desplazamientos continuos» de los civiles en el noroeste de Siria, donde la población sigue siendo objetivo «diario» de violencia a pesar del alto al fuego que entró en vigor la semana pasada.
«Nuestra principal preocupación es la seguridad de los civiles que están en grave peligro», expresó Bachelet, quien consideró «muy preocupante» que continúen los combates pese a la tregua. «Mujeres, hombres y niños que simplemente hacen sus actividades rutinarias en casa, trabajo, mercados y escuelas están muriendo o sufriendo mutilaciones por esta violencia sin sentido», añadió en un comunicado.
La Alta Comisionada lamentó que el último alto al fuego, «como otros en el último año», haya «fallado de nuevo». Desde el inicio de la ofensiva del gobierno de Bashar Al Assad en Idleb a finales de abril de 2019, la oficina de Derechos Humanos de la ONU ha verificado la muerte de más de 1.500 civiles, entre ellos 43 niños. Del total de víctimas mortales, sólo 75 estaban en zonas bajo control de las fuerzas de Al Assad.
La oficina de Bachelet aseguró que el 11 de enero, unas horas antes de la entrada en vigencia del último acuerdo, las operaciones militares se intensificaron y al menos 20 civiles murieron por varios ataques aéreos, citó la agencia de noticias Europa Press.
El día 12, ya con el alto al fuego, cuatro civiles murieron por ataques contra zonas residenciales de Alepo controladas por el gobierno, mientras que al día siguiente un civil pereció por el impacto de un misil contra su casa en la zona rural de Maarat An Numan, bajo dominio rebelde.
Los bombardeos aéreos se reanudaron este miércoles y jueves, según el Alto Comisionado, que ha verificado al menos 15 fallecidos en operaciones perpetradas el 15 de enero contra varios puntos de Idleb. El mismo día, siete personas resultaron heridas por un ataque en la localidad de Ariha que causó daños en una escuela femenina.