El anuncio que hizo el Gobierno nacional no cayó bien en el sindicato de trabajadores de estaciones de servicio
El Gobierno nacional, a través del ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, anunció que en las próximas semanas se implementará una nueva normativa para habilitar el autodespacho de combustible en las estaciones de servicio de todo el país. La medida, que busca replicar sistemas utilizados en Estados Unidos y algunos países europeos, generó una fuerte reacción entre los trabajadores del sector y sus representantes sindicales.
En Santa Fe, donde aproximadamente 5 mil empleados dependen de este servicio, el anuncio encendió las alarmas. “Es una preocupación profunda. El anuncio nos tomó por sorpresa y genera una angustia enorme entre los trabajadores por las fuentes de empleo que podrían perderse”, expresó Ismael Marcón, representante del sindicato de trabajadores de estaciones de servicio de Rosario, en declaraciones radiales.
Marcón advirtió que la medida podría traer múltiples inconvenientes tanto para los usuarios como para las estaciones de servicio. Según el gremialista, el autodespacho es una actividad “sucia y peligrosa”, ya que el manejo de combustible conlleva riesgos de derrame, incendios y contaminación . Además, subrayó que los jugadores recibirán capacitaciones periódicas para manipular combustibles con seguridad, mientras que los usuarios no estarían preparados para lidiar con posibles incidentes.
“El pico puede fallar, generar derrames o un principio de incendio. ¿Quién lo resolverá? ¿El usuario o el playero que se capacita continuamente?”, cuestionó Marcón, quien también señaló que el combustible contiene componentes tóxicos que los trabajadores manejan con guantes especiales.
Impacto en el empleo y el servicio
Desde el sindicato aseguran que la implementación del autodespacho no reducirá los precios del combustible, sino que incrementará las ganancias de los empresarios. “La mitad del precio del combustible son impuestos, por lo que esta medida no impactará en el costo al consumidor”, explicó Marcón.
También recordó experiencias fallidas de este sistema en los años noventa, cuando “se producían fugas para no pagar, peleas entre clientes, derrames y quejas por el olor y la suciedad”. En su análisis, la medida «precariza» un servicio que actualmente tiene un estándar de calidad alto.
Además, destacó que el playero cumple una función integral en las estaciones: “Te despacha, te cobra y organiza todo de forma segura. Sin ellos, los clientes deberán ingresar a la tienda, hacer fila para pagar y resolver los problemas que puedan surgir”.
El anuncio de esta medida podría derivar en un conflicto gremial de mayor escalada, dado que los sindicatos de todo el país anticiparon su rechazo unánime. “Estamos atentos al alcance del decreto, pero sabemos que esto afectará tanto a los trabajadores como a los usuarios”, concluyó Marcón.