Los locatarios seguirán sufriendo duros incrementos. Mirá cómo quedan los valores en el último mes del año
Los alquileres en Rosario experimentarán incrementos significativos durante diciembre, con tres modalidades principales de ajuste según el tipo de contrato. La desregulación impulsada por el gobierno de Javier Milei ha modificado el panorama locativo, dando lugar a nuevos acuerdos entre propietarios e inquilinos y reduciendo los períodos de actualización.
- Ajuste por Índice de Contrato de Locación (ICL)
Los contratos firmados en diciembre de 2022 bajo la modalidad de tres años experimentarán su segundo ajuste interanual, con un aumento del 208%. Por ejemplo, un alquiler que en diciembre de 2022 costaba $200.000, subió a $456.000 en diciembre de 2023 y ahora alcanzará $1.049.000 mensual a partir de diciembre de 2024. Es importante destacar que el ICL varía diariamente, por lo que el porcentaje exacto de aumento depende del día en que fue firmado el contrato.
- Ajuste por Casa Propia
Esta modalidad, vigente entre octubre y diciembre de 2023, establece ajustes semestrales basados en el coeficiente Casa Propia. En diciembre, el incremento será del 66,97%. Por ejemplo, un inquilino que comenzó su contrato el 1 de diciembre de 2023 pagando $100.000 mensuales, abonará $156.496 a partir de junio de 2024 y $261.295 a partir de diciembre del mismo año.
- Ajuste por Índice de Precios al Consumidor (IPC)
Para contratos firmados tras la derogación de la normativa el 29 de diciembre de 2023, se implementó la libertad de pactar los índices y períodos de ajuste. La mayoría optó por actualizaciones trimestrales vinculadas al Índice de Precios al Consumidor (IPC), que reflejan directamente la inflación. En diciembre, el aumento será del 10,69%. Por ejemplo, un alquiler de $200.000 firmado en septiembre de 2024 y ajustado trimestralmente subirá a $218.225 en diciembre.
Impacto en el mercado locativo
La flexibilización de las reglas también ha aumentado la oferta locativa en la ciudad, aunque con ajustes más frecuentes. Este nuevo escenario implica que tanto inquilinos como propietarios deban adaptarse a las cambiantes condiciones del mercado, mientras que los costos de vivienda siguen siendo un desafío para las familias rosarinas.