Una joven de 25 años fue asesinada a puñaladas delante de su pequeño hijo de 4 años por un sujeto que la atacó sin motivos aparente, en un femicidio ocurrido en Ensenada, por el que fue detenido el supuesto autor del hecho, un sujeto de 24 años.
Fuentes policiales informaron que durante la noche del lunes fue capturado el presunto responsable del crimen de la peluquera Nadia Ferraresi, de 25 años, ocurrido en horas de la mañana.
El sospechoso tiene antecedentes penales y fue apresado cuando se encontraba en las calles 12 y 51, a metros de la plaza Moreno y de la Municipalidad.
La detención fue realizada tras una intensa búsqueda por efectivos de la motorizada La Plata y de la comisaria Ensenada Primera, dependencia que lleva el caso.
La joven fue herida con un arma blanca este lunes a la mañana y falleció horas después en la calle Cestino y Bossinga de Ensenada.
El trágico episodio comenzó minutos antes de las 6 del lunes, frente a una peluquería emplazada en Bossinga y Francisco Cestino, de Ensenada.
De acuerdo a lo indicado por el sitio web Editor Platense, la víctima se encontraba con su nene de 4 años cuando fue atacada, sin motivo aparente, por un sujeto, quien le asestó una certera puñalada en la zona abdominal.
Tras la salvaje agresión el sujeto se dio a la fuga, mientras que la joven fue trasladada de urgencia al hospital Cestino, donde ingresó en gravísimo estado, con un profundo corte y un profuso sangrado.
Sin embargo, pese al esfuerzo de los médicos, nada pudo hacerse yfalleció alrededor de las 20.
Inmediatamente la causa penal llevada a cabo por la UFI número 17, a cargo de la fiscal María Di Lorenzo se recaratuló y pasó de «lesiones graves» a «homicidio calificado por violencia de género».
En ese contexto, efectivos de la DDI local iniciaron un rápido trabajo y pudieron dar con un testigo presencial del hecho, quien fue de vital aporte para identificar al femicida.
Los voceros policiales consultados indicaron que el presunto autor del femicidio es un sujeto de 24 años, que vive a tres cuadras de la casa de la víctima y se conocerían.
En ese sentido, un testigo habría aportado un dato clave para la investigación: el acusado no solo se conocería a su víctima sino que «estaba obsesionada con ella y salió a matarla».
Aparentemente, dos horas después del ataque, el sospechoso se habría presentado en el centro de salud donde estaba internada Nadia, con un corte en su mano derecha y tras ser asistido, se fue, sin dar mayores explicaciones.
Al tenerlo identificado, los numerarios de la DDI se entrevistaron con familiares del sospechoso, quienes afirmaron que el imputado «padece de esquizofrenia y delirios místicos», a la vez que corroboraron que no «tiene paradero fijo».