Así lo aseguró el ministro de Desarrollo Social de la Nación, al participar del encuentro internacional "Repensar el contrato social en América Latina y el Caribe"
El ministro de Desarrollo Social de la Nación, Daniel Arroyo, participó de un encuentro internacional con referentes de la región y sostuvo que el objetivo del Gobierno es «reconstruir la movilidad social a través del trabajo y eliminar las desigualdades».
Se trató del encuentro «Repensar el contrato social en América Latina y el Caribe», del que participaron la senadora y ex vicepresidenta de Uruguay, Lucía Topolansky; la directora programática para América Latina y el Caribe de la ONG Oxfam Intermon, Andrea Costafreda; y la candidata a constituyente chilena y militante de la Coordinadora Feminista 8M de ese país, Karina Nohales.
El moderador fue Mario Pezzini, director del Centro de Desarrollo de la OCDE, que organizó el diálogo junto a la revista francesa Le Gran Continent.
«La Argentina pudo dar respuesta a la crisis y contener la situación social en el marco de la pandemia, gracias a las acciones llevadas a cabo por el Gobierno y sobre todo por una gran red social que tiene nuestro país», subrayó Arroyo.
«Se han generado mesas de gestión asociada con organizaciones sociales, sindicatos, empresas y el Estado, enfocadas en un primer momento en lo alimentario, y que hoy tienen el desafío de pasar de ahí a la reconstrucción y al trabajo, con tres ejes fundamentales pensando en un nuevo contrato social: establecer un piso de ciudadanía, reconstruir la movilidad social a través del trabajo, y eliminar las desigualdades que existen en diferentes niveles», subrayó el ministro.
Topolansky, por su parte, expresó: «Los bienes públicos no pueden ser un bien del mercado. La salud, por ejemplo, no tiene que ser objeto de lucro, más bien de servicio. Cuando eso se saca, se produce el estallido social. Y eso ha sucedido con la pandemia, y en ese sentido, admiro el esfuerzo de los argentinos para reconstruir la salud pública que había sido casi eliminada. Por eso, creo que los gobiernos y la sociedad civil deben ser guardianes de esos bienes».