"Si no hay acuerdo, lo que haríamos es retomar el programa con el Fondo Monetario Internacional", advirtió el ministro Guzmán
Hace poco menos de un mes, el gobierno argentino presentó la última oferta de canje por la deuda externa. En ese momento, ya se había aclarado que era «el último esfuerzo» que se podía hacer desde la administración. Pasado este tiempo y ante la negativa de la mayoría de los acreedores, Argentina amenaza con retirarse de la negociación y pasar a las tratativas con el FMI en caso de ser necesario.
«La oferta está vigente y los acreedores tienen tiempo de aceptar. Es su decisión sacar al país de una situación de default en la que ya está de forma concreta desde finales de abril de 2018», aseguró el ministro de Economía Martín Guzmán.
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El funcionario dejó en claro que aún no se ha definido si se extenderá el plazo de aceptación para la oferta que vence el martes. Ante el estado de la negociación, con un grupo de bonistas en posición «bloqueadora» ante un acuerdo parcial, exige una mejora económica y por eso el Ejecutivo lanzó la advertencia.
La semana pasada, Blackrock informó a Guzmán que el comité de acreedores que lidera había reunido más de la mitad de los tenedores de la deuda argentina pendiente de reestructuración. Así, sin un acuerdo con su grupo, el canje no prosperará.
El ministro indicó: «No vamos a ofrecer más». «Si no hay acuerdo sobre esta propuesta el camino es otro. En ese caso, lo que haríamos es retomar el programa con el Fondo Monetario Internacional, pero en las condiciones que necesitamos tener», remarcó.
En caso de que esto pase, se aceleraría un acuerdo con el principal acreedor y se dejaría para 2021 el cierre de canje con los bonistas. Esto, pondría a los fondos de inversión en la elección de esperar sin nada o ir a la justicia para cobrar por juicios, una opción que requiere dinero y tiempo para ambas partes.