El fiscal del juicio a Nahir Galarza, la joven procesada por el crimen de Fernando Pastorizzo en la ciudad de Gualeguaychú, fue amenazado de muerte a través de una red social.
«Tené cuidado de no aparecer con un tiro en la cabeza, hijo de puta», fue uno de los mensajes que recibió en su cuenta de la red social Facebook el fiscal Sergio Rondoni Caffa.
También fueron enviadas a la cuenta de la misma red social, pero de la esposa del funcionario, insultos y amenazas de «carpetazos».
«Van a tener un problema muy serio. Tu marido es un machista hijo de puta. Tengo preparada una investigación con los sobre sueldos que cobró de unos narcos. Ojo», fue el mensaje que recibió la mujer de Rondoni Caffa, quien presentó la denuncia en las últimas horas.
Las amenazas fueron recibidas por el fiscal y su esposa, luego de la última jornada del juicio, en la que Rondoni Caffa pidió, la igual que las dos partes querellantes en el proceso, la prisión perpetua para la joven de 19 años que es hija de un policía.
En cambio, los abogados defensores José Ostolaza y Horacio Dargainz pidieron una pena máxima de cinco años de prisión por «homicidio culposo» y alegaron que existió «violencia de género» por parte de la víctima.
El crimen de Fernando Pastorizzo, de 20 años, ocurrió el 29 de diciembre último alrededor de las 5:00 y Galarza, que primeramente dio su versión de los hechos, confesó horas más tarde haber sido la autora de los disparos.
La joven había dicho que los disparos fueron cometidos con el arma reglamentaria de su padre que es efectivo de la Policía de la provincia de Entre Ríos.
Sin embargo, en una segunda declaración dijo que había sido su novio el que había tomado el arma y que los disparos los había hecho en forma accidental.
El 11 de abril pasado, el juez Figueroa determinó que Galarza sea juzgada por el delito de «homicidio doblemente calificado», al elevar el caso a juicio.
El magistrado decidió unificar la acusación por «homicidio doblemente calificado por el uso de arma y la relación de pareja» y desestimó el agravante de «alevosía», que había sido solicitado por la querella, ya que sostuvo que esa circunstancia se tiene que determinar durante el juicio.