Desde el Sindicato de Profesionales Universitarios de la Sanidad (Siprus) explicaron que "el 20% trabaja en negro, sin obra social ni aportes jubilatorios"
En los centros de salud públicos de la provincia de Santa Fe se notó un marcado incremento de la demanda: en lo que va del año aumentó un 11%. Producto de la crisis económica, los santafesinos no pueden costear una obra social, por lo que se vuelcan a la atención pública, la cual ve cada vez más afectado su servicio.
Recientemente, el gobierno provincial destinó 500 millones de pesos a la salud pública para cubrir recortes presupuestarios de Nación. Pero, todo indica que la inversión no es suficiente y los centros de salud se ven cada vez más saturados.
Las guardias de los efectores públicos no dan abasto, las demoras se intensifican y las denuncias por falta de personal se volvieron más frecuentes. Para cubrir la demanda, se contratan refuerzos, pero desde los gremios denuncian que eso implica precarización laboral. Diego Ainsuain, presidente del Sindicato de Profesionales Universitarios de la Sanidad (Siprus), dialogó en CLG y explicó la situación que se atraviesa en la provincia: «En el Gran Rosario hay gente que no puede siquiera pagarse un boleto de colectivo para venir a hacerse una consulta, menos pueden pagar una obra social. Por eso se vuelcan a la salud pública».
«Reconocemos la inauguración de infraestructura o de algunos hospitales en la provincia, pero vemos que el tipo de contratación que realiza el Ministerio y la cantidad de personal deja una parte de la demanda insatisfecha. Ésta se da en lugares específicos, como salud mental o prácticas quirúrgicas programadas. En el resto de los efectores lo que hubo es un aumento en la demora del servicio», indicó.
Ainsuain se refirió a la precarización laboral que acompaña a la contratación de refuerzos para tratar de normalizar los servicios: «Mucha de la gran demanda es absorbida por monotributistas, entre el 15 y 20% de la planta del Estado hoy está precarizada, trabajan en negro, sin obra social ni aportes jubilatorios. Además, cobran menos. Por ejemplo, si tenés una vacante por jubilación y en ese cargo contratás a un monotributista, esa persona está cobrando menos. Por lo tanto, a veces se normaliza el servicio pero a costa de la salud de los trabajadores».
Por otra parte, el titular de Siprus mostró preocupación al hablar sobre el cambio de gobierno provincial: «Aparentemente todos los meses vamos a tener que discutir la cláusula gatillo, tanto el gobierno que está como el que viene dicen que la cláusula va a depender de lo que pase con la recaudación. Hoy toda nuestra actividad está puesta en eso, en garantizar el personal y las condiciones de los compañeros que están trabajando».
Por último, Ainsuain adelantó que la situación empeorará de no haber un cambio: «Si no hay una política distinta, esto se va a profundizar. Hace un año y medio que lo vinimos denunciando y no nos daban respuesta, ahora hace una semana el Ministerio lo reconoció formalmente. Con las condiciones que hoy tenemos no vamos a poder hacerle frente a lo que se viene».