Según el Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz, los departamentos de 1 dormitorio registraron este mes un aumento del 5,6% respecto a mayo
Los alquileres en Rosario siguen en alza y el acceso a la vivienda se vuelve cada vez más difícil para los sectores asalariados. Según el relevamiento mensual del Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz (Ceso), los departamentos de dos ambientes registraron en junio un aumento del 5,6% respecto al mes anterior, mientras que los de tres ambientes subieron un 2,1%.
La situación es aún más compleja si se analiza el peso que el pago del alquiler tiene sobre los ingresos. Por ejemplo, un maestro de grado sin antigüedad debe destinar el 49% de su salario únicamente al alquiler de un departamento de dos ambientes, sin contar expensas ni servicios.
En términos concretos, la mediana de precios en Rosario es de $280.000 para un monoambiente, $380.000 para un dos ambientes y $490.000 para un tres ambientes. Los incrementos interanuales fueron del 75%, 81% y 96%, respectivamente.
La carga sobre los ingresos es alarmante: un jubilado que percibe $374.724 necesita destinar casi el 75% de su haber mensual para alquilar un monoambiente, y quien cobra el Salario Mínimo Vital y Móvil ($313.400) debe invertir el 89,3% de su sueldo para acceder a ese mismo tipo de vivienda.
Además, la oferta de departamentos en alquiler en la ciudad cayó un 9,5% en comparación con junio de 2024, lo que tensiona aún más el mercado.
Desde Ceso recordaron que los valores informados no contemplan expensas ni servicios, que en promedio representan un 15,8% adicional del costo del alquiler. El Índice para Contratos de Locación (ICL) del Banco Central, que regula los contratos vigentes, reflejó un incremento interanual del 79,4% al 1° de junio.
En un contexto donde los sueldos pierden poder adquisitivo, el acceso a la vivienda en Rosario se consolida como una de las mayores preocupaciones para trabajadores, jubilados y jóvenes que buscan independizarse.
