Son bacterias que viven en el agua y que generan un tono verdoso
En las últimas horas se confirmó la presencia de Cianobacterias en el Río de la Plata y los especialistas manifestaron la necesidad de que las personas no se metan al agua ya que puede ser nocivo para la salud.
Según las especificaciones médicas los efectos adversos de dicha bacteria en una persona son: vómitos, diarrea, dolor de cabeza, debilitamiento muscular y alergias en la piel.
La Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Provincia de Buenos Aires fue quién dio aviso sobre la presencia de la bacteria en el Río de la Plata y explicó que se debe a las altas temperaturas que azotan la región por lo que pronostican que en los próximos días todavía podrían verse.
Allí informaron que hay abundancia de cianobacterias en el balneario La Balandra y el Parador Municipal, en la localidad de Berisso, en Chascomús y en las lagunas Rocha, San Bartolo y Las Mulitas.
En dicho informe dado a conocer la subsecretaría indicó que todos los días se hace una evaluación y seguimiento sobre la presencia de la bacteria y que hay cuatro niveles de riesgo para la salud que se divide según colores.
– Verde: pueden bañarse sin riesgo ya que no se informó la aparición de cianobacterias.
– Amarillo: hay pequeñas manchas verdes en la superficie y si alguién se baña debe limpiarse luego con agua fría y limpia.
– Naranja: el agua se ve de un color verde brillante en la superficie y en la arena.
– Rojo: se ve una masa verde oscura, amarronada, con aspecto de nata espesa y está prohibido bañarse.
Qué es una Cianobacteria
Según el Ministerio de Salud son organismos microscópicos, bacterias Gram-negativas que contienen clorofila, lo que les permite realizar fotosíntesis. Por ello históricamente se las ha identificado como algas verde-azules. Están presentes en aguas dulces, saladas, salobres y zonas de mezcla de estuarios.
Muchas especies de cianobacterias producen toxinas, las cuales son contenidas en la célula o exudadas al medio, por lo que pueden aparecer disueltas en el agua, constituyéndose en un problema de significancia para la salud humana y ambiental.
Ante la continua aparición de las bacterias en gran parte del mundo la Organización Mundial de la Salud las calificó como un problema de salud emergente.
Su aparición se relaciona por la presencia aumentada de nutrientes como nitrógeno y fósforo en los cuerpos de agua, temperaturas altas, días sin viento ni oleaje, y suficiente luz solar. Este proceso, llamado eutrofización, es natural; actualmente está acelerado por factores antropogénicos y climáticos.
Las personas más vulnerables a contraer síntomas son: los niños, ancianos, pacientes inmunodeprimidos, embarazadas, aquellas personas que desarrollen actividades en medio acuático y las mascotas, en particular los perros.