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Alerta sarampión: un nuevo caso en el país


El sarampión es todavía común en muchas partes del mundo y esto se debe, principalmente, a que los viajeros con Sarampión hacen circular el virus y lo introducen en países en donde la enfermedad estaba totalmente controlada o en vías de control.

“Estamos atravesando una crisis global, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) son las cifras más abultadas de la última década”, indica el doctor Osvaldo Teglia, profesor de la cátedra Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad Austral. En Venezuela se han notificado un total de 6.370 casos de Sarampión entre 2017 y 2018, y 62 casos fatales; en Europa se triplicaron los casos en 2018 (82.596 casos y 72 muertes) con respecto a 2017, una cifra 15 veces superior a la de 2016; y en Estados Unidos, desde el 1 de enero de 2019 declararon 6 focos de Sarampión y 159 afectados.

“En Argentina se detectaron 43 casos de sarampión hasta diciembre de 2018, emitiéndose varias alertas epidemiológicas al respecto. De todas formas, vale destacar que nuestro país cuenta con un calendario de vacunación ejemplar a nivel mundial, obligatorio y con un acceso gratuito a la gran mayoría de las vacunas requeridas”, detalla el doctor Teglia.

Lo llamativo es que 3 de cada 4 casos que ocurrieron en Europa en 2018, provienen de 6 países con cobertura para Sarampión igual o menor del 88%, porcentaje considerado “bajo” por organismos internacionales. “Esto parece explicarnos la reemergencia de esta enfermedad en el continente ya que los porcentajes de coberturas que la OMS plantea deben ser superiores al 95%”, expresa el especialista en la materia.

¿Cuáles son las razones para esta baja cobertura de vacuna antisarampionosa? ¿Qué ha llevado a que países con aparente bienestar económico, como Italia o Francia, lleguen a tener últimamente coberturas inadecuadas de ciertas vacunas? “Según algunos autores, los programas de inmunización de la población infantil en Europa muestran una gran variabilidad en cuanto a las vacunas incluidas, las pautas y edades de vacunación y también en cuanto a los sistemas de recomendación y financiación, aparentemente conspirando con la universalización de los esquemas de inmunizaciones y tal vez explicando parte de esta crisis. Además, existen en Europa y en Estados Unidos diversos movimientos y comunidades “antivacunas”, incluso partidos políticos, que expresan su escepticismo en cuanto a los beneficios de las vacunas”, responde el profesor de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad Austral.

Sarampión: Preguntas claves

¿Cómo se presenta el contagio?

El Sarampión es tan contagioso que, si una persona lo posee, el 90% de las personas cercanas a ella, que no son inmunes, también se infectarán. Las personas infectadas pueden transmitir el virus desde 4 días antes hasta 4 días después de que aparezca la erupción.

Es una enfermedad muy contagiosa debido a que vive en la nariz y las mucosidades de la garganta del individuo infectado y se propaga por el aire a través de la tos y estornudos. Además, el virus puede vivir hasta 2 horas en un espacio aéreo donde la persona infectada tosió o estornudó, de esta forma, cualquier persona que ingrese a ese lugar dentro de las 2 horas y respire aire contaminado se podrá contagiar.

También, se puede contraer el virus tocando superficies contaminadas.

¿Cuáles son los síntomas?

Comienza típicamente con fiebre alta, tos, secreción nasal, y ojos rojos y llorosos (conjuntivitis).

Dos o tres días después del inicio de estos síntomas, pueden aparecer lesiones pequeñas e irregulares en la boca de color rojizo con el centro blanco, llamadas manchas Koplik. Estas son un signo temprano de infección por Sarampión.

De 3 a 5 días después, estalla la erupción cutánea de pequeñas manchas rojizas. Cuando esta aparece, los pacientes se encuentran francamente febriles, pudiendo la temperatura ser de 39-40°C. Por lo general, comienza con manchas rojas planas en la cara, en el cuero cabelludo y se extienden hacia abajo hasta el cuello, el tronco, los brazos, piernas y pies.

¿Cuál es el tratamiento?

Para el virus del Sarampión no existe un tratamiento específico, pero la gran mayoría de las personas se recuperan de esta enfermedad sin secuelas. No obstante, en algunos casos puede tener mal pronóstico, especialmente en bebés y niños pequeños, en donde ocasionalmente se presentan complicaciones como neumonía y/o encefalitis, de elevada morbimortalidad.

De hecho, 1 de 1000 niños afectados puede llegar a desarrollar encefalitis. Otras secuelas pueden ser la sordera y el daño cerebral.