Por Omar Sued (*)
El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa y que no tiene tratamiento. Si bien la mayoría resuelve la infección en forma espontánea, en algunos casos puede llevar a complicaciones muy serias. Se contagia a través de la tos y los estornudos y el virus puede vivir durante dos horas en el aire donde una persona infectada haya tosido o estornudado. Los síntomas iniciales, que suelen aparecer entre 8 y 12 días después de la infección, consisten en fiebre alta, secreción nasal, coloración roja en los ojos y pequeñas manchas blancas en la cara interna de la mejilla. A los 5 días aparece un exantema (sarpullido o rash) y puede complicarse con neumonía grave y /o encefalitis (infección del sistema nervioso central). Puede ser peligrosa sobre todo para los bebes, niños pequeños y en personas inmunocomprometidas.
El último caso local en Argentina se registró en el año 2000, desde entonces se produjeron pequeños brotes asociados en general a viajeros o casos importados. Durante este año se documentaron 29 casos, lo que representa el mayor brote de los últimos 20 años. Existe también una alta circulación del virus en algunas áreas de Brasil, con más de 4.500 casos y 5 muertos, también en Venezuela, Europa y Estados Unidos.
La mejor manera de protegerse contra el sarampión es vacunándose con la vacuna triple viral (paperas, sarampión y rubéola), o con la doble viral (sarampión y rubéola).
La vacuna se aplica a todos los niños a los 12 meses de vida y al ingreso escolar.
A fin de frenar el brote de sarampión se requieren que todos los trabajadores de salud (independientemente de la edad) y todas las personas nacidas después del año 1965 hayan recibido estas 2 dosis de vacunas:
– Los niños de entre 12 meses y cuatro años deben tener una dosis de triple viral.
– Los mayores de 5 años deben tener dos dosis de vacuna doble o triple viral.
-Todo personal de salud debe acreditar dos dosis o demostrar que está protegido ( o sea tener IgG positiva en sangre para sarampión).
En la Ciudad de Buenos Aires y en las regiones V, VI, VII y XII de la provincia de Buenos Aires se tomaron medidas adicionales para limitar la circulación viral. En estas áreas se recomienda que:
– Los bebés entre 6 y 11 meses de vida inclusive, deben recibir una dosis de vacuna triple viral
– Los niños entre 13 meses y hasta los 4 años inclusive, deben tener dos dosis de vacuna triple viral
En cuanto a los síntomas, si una persona presenta fiebre y erupción cutánea se debe consultar inmediatamente al médico y no concurrir a lugares públicos hasta que el médico lo autorice.
* Médico infectólogo. Presidente de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI).