Desde la Universidad Nacional del Litoral advierten que se perdió más del 7% de la planta en poco más de un año
Un informe de la Universidad Nacional del Litoral (UNL) expuso en números la gravedad de la crisis que atraviesa el sistema universitario nacional. Entre enero de 2024 y mayo de 2025, 151 docentes –entre profesores y auxiliares– renunciaron a sus cargos en esa casa de estudios y otras 26 personas solicitaron licencias sin goce de haberes. A esto se suman 103 jubilaciones, lo que implica que en solo 17 meses se perdió más del 7% de la planta docente de la UNL.
El dato fue confirmado por el rector Enrique Mammarella, quien en diálogo con Radio UNR expresó su preocupación: “Estamos perdiendo futuro. Son recursos humanos que lleva mucho tiempo formar y ahora muchos deciden irse al exterior o cambiar de lógica de trabajo porque el sueldo no alcanza para vivir”.
El perfil de quienes se desvinculan también enciende alarmas: el 81% de las personas que renunciaron o tomaron licencia tienen menos de 50 años. “Eso pone en riesgo la calidad educativa de los próximos años. Son docentes con experiencia, formación y proyección en la carrera universitaria”, advirtió Mammarella.
Pluriempleo y agotamiento
Además del éxodo, el rector alertó sobre otro fenómeno cada vez más extendido: el pluriempleo. “Muchos de los que se quedan deben asumir más de un trabajo para sostener a sus familias, lo que afecta su formación continua y tiempo disponible para la docencia y la investigación”, explicó.
Según el relevamiento de la UNL, las 151 renuncias se desglosan en 24 profesores y 127 auxiliares. Entre ellos, 54 tienen entre 30 y 39 años y 27 son menores de 30, lo que demuestra que el impacto se da principalmente sobre las nuevas generaciones de docentes.
En cuanto a las 26 licencias sin goce de sueldo, 16 fueron por motivos personales y 10 por estudios en el exterior. Muchas veces, explican desde la universidad, estos pedidos de licencia anticipan renuncias definitivas.
Movilización y reclamo
Frente a este escenario, la UNL se sumará este jueves 27 a una nueva jornada nacional en defensa de la universidad pública.
“Vamos a acompañar la juntada de firmas para legitimar el reclamo por la Ley de Financiamiento Universitario que debe tratar el Congreso. Si no tenemos esa ley, el segundo semestre será muy complejo. Ya se perdió el 7,34% de la planta docente en 17 meses, contra el 4,77% acumulado en los dos años anteriores”, remarcó Mammarella.
La educación superior atraviesa una crisis que no es solo presupuestaria: está en juego el futuro de las universidades públicas y su capacidad para seguir formando profesionales en un país que los necesita.