El primero de ellos se encontró en plantas ornamentales de ingreso ilegal en la Región de Tarapacá
El Servivio Agrícola y Ganadero de Chile (SAG) emitió una alerta fitosanitaria luego que se detectaran dos ejemplares de Lissachatina Fulica, conocido como caracol gigante africano, en el vecino país.
El primero de ellos se encontró en plantas ornamentales de ingreso ilegal en la Región de Tarapacá. El segundo ejemplar se detectó en la Región de Arica y Parinacota, luego que turistas trajeran como recuerdo una concha desde un viaje familiar a Brasil. Ambos casos se registran en el norte trasandino.
Por qué es un peligro este caracol
Lissachatina Fulica es considerado como una de las 100 especies exóticas invasoras más peligrosas del mundo. Puede portar nematodos parásitos que ponen en riesgo la salud de las personas, se transmiten a través secreciones y baba contaminada del caracol. Es capaz de causar incluso meningitis en los humanos.
Desde el punto de vista agrícola, el caracol gigante africano es omnívoro, con un apetito voraz, causando un gran desmedro en las plantas cultivadas. Se trata de una especie hermafrodita, que alcanza altas poblaciones, las que llegan a vivir hasta 10 años.
El SAG adviertió que su impacto en el medio ambiente también es considerable por su gran capacidad para desplazar a poblaciones de caracoles nativos al competir por el mismo hábitat y alimento, y por la depredación de flora nativa, entre otros.
Características del caracol gigante africano
La entidad explicó que este molusco terrestre que se puede identificar a través de su caparazón o concha, la cual es mucho más grande que la del caracol común, llegando a medir hasta 30 cm de largo y 10 cm de ancho cuando alcanza su estado adulto.
Detalla que su forma es cónica, con un corte en la base de la columna. Mientras que el borde de la apertura del caparazón es filoso y se puede sentir el borde cortante fácilmente al tacto.
Su color es castaño o marrón en general, con bandas longitudinales a lo largo del caparazón castaño claras y oscuras irregulares.
Entre las características de este molusco se cuenta que es considerado un “caracol polizón”, es decir, la forma de ingresar a nuevos lugares podría ser adherido en maletas, autos, material de embalaje, etc.