La tasa de infecciones semanales en el distrito afectado sube a 41,13 por 100.000 habitantes
Un nuevo foco de contagios de coronavirus detectado en una planta avícola en el estado federado alemán de Baja Sajonia, encendió las alarmas de las autoridades después de que se verificaran 66 positivos, según reportan medios locales.
Las infecciones están relacionadas con el personal de un matadero del grupo Wiesenhof en Lohne, y se han verificado tras realizarse un total de 1.046 test entre trabajadores y personas en contacto con estos. Con este cómputo, la tasa de infecciones semanales en el distrito afectado sube a 41,13 por 100.000 habitantes, cuando el máximo tolerado por las autoridades alemanas antes de establecer medidas restrictivas, es de 50 contagios semanales por esa cantidad de habitantes.
El brote es, sin embargo, de dimensiones muy inferiores al que se detectó hace unas semanas en un matadero de Gütersloh, en que se certificaron más de 1.500 infecciones entre sus trabajadores o personas de contacto, lo que llegó a restringir los movimientos de los 640.000 habitantes del distrito afectado, informó el servicio público de noticias alemán Deutshe Welle.
En Alemania se han verificado hasta ahora 201.823 contagios, según las cifras del Instituto Robert Koch, competente en la materia. Un total de 187.800 son pacientes recuperados, mientras que el número de víctimas mortales se sitúa en 9.086.
El número de nuevas infecciones en las últimas 24 horas fue de 249 casos, mientras que el llamado factor R, que mide la intensidad de un brote y su potencial pandémico, se sitúa en el 1,25. Las autoridades alemanas consideran que la situación en el país se ha estabilizado y que los rebrotes que se produjeron en las últimas semanas fueron contenidos sin mayores dificultades.
El gobierno federal de Angela Merkel y los estados federados acordaron la semana pasada una estrategia común y enfocada al nivel local para controlar estos brotes. El plan, coordinado por el ministro de la Cancillería, Helge Braun, consiste en identificar primero el epicentro en el que se ha originado el rebrote -sea una fiesta, una celebración familiar, un centro de trabajo o una comunidad religiosa- y contenerlo mediante el rastreo de contactos y la realización de tests.
Si la cadena de contagios se extiende, se pasaría a ampliar las restricciones hasta abarcar el municipio o el distrito. En caso extremo, se impondría la prohibición a los habitantes afectados de salir de su región, tal y como defiende el gobierno federal.