El padre de Paula, la mujer sanlorecina de 33 años, desaparecida desde el 18 de septiembre de 2011, recibió con mucha tristeza y bronca el fallo que absolvió a los acusados en la causa.
Alberto Perassi escuchó el veredicto del juicio por la desaparición de su hija Paula en la puerta del Nuevo Centro de Justicia Penal de Rosario, ubicado en Mitre y Virasoro. Acompañado por su esposa y cientos de personas que apoyan su lucha y el pedido de justicia por la joven mujer, desaparecida en San Lorenzo desde el 18 de septiembre de 2011, el hombre recibió la durísima noticia de la absolución de todos los acusados.
«¿Dónde están mis derechos? ¿Dónde están los derechos de Paula Perassi?», se preguntó frente a los medios que se le acercaron tras la lectura de la sentencia, que los abogados ya adelantaron que apelarán. Su esposa, descompensada y acongojada por la resolución, no se dirigió a la prensa y debió recibir atención médica.
Alberto llevó desde siempre adelante el pedido de justicia por su hija, una joven de 33 años que según la fiscalía y la querella quedó embarazada de su amante, un importante empresario del cordón industrial, quien la obligó a abortar y en la intervención perdió la vida. Perassi se ha encadenado a los tribunales en reiteradas ocasiones, encabezó marchas y todo tiempo de reclamos. Actualmente, viste un chaleco antibalas, ya que también fue amenazado. Este mediodía, consideró que el fallo «es la última parte de la injusticia que me dieron siempre». Se lo notó sumamente decepcionado y hasta con cierta resignación.
«¿Dónde está la justicia para mí y para mi familia?», continuó preguntándose Perassi, quien desde un principio reclamó saber dónde se encuentran los restos de su hija, para poder enterrarla y tratar de hacer el duelo. Entre los acusados que fueron absueltos y serán liberados en las próximas horas, se encuentran Gabriel Héctor Strumia, amante de Paula; su esposa Roxana Andrea Michl; la partera Mirta Dominga Ruñisky y varios policías acusados de destruir pruebas y encubrir los hechos.
Finalmente, Perassi afirmó: «Paula sigue desaparecida en democracia».