El Presidente hizo estas declaraciones en Quilmes, durante el cierre de la 26ta. Conferencia Industrial, organizada por la Unión Industrial Argentina (UIA), para debatir los ejes de una agenda federal para la recuperación y el crecimiento
El presidente Alberto Fernández celebró hoy el hecho de que se sumaron “todos los argentinos” en la misión de “reconstruir un entramado social que estaba absolutamente lastimado” por la pandemia y remarcó: “De la pobreza no se sale con el auxilio de Estado a través de planes, se sale con empresarios que inviertan y den trabajo”.
Sucedió en una jornada en la que el Observatorio de la Deuda Social Argentina de la Universidad Católica Argentina dio a conocer el “Informe de Avance: Deudas Sociales en la Argentina 2010-2020. Crisis del empleo, pobrezas y desigualdades estructurales en el contexto COVID-19”, el cual arrojó aumentos de la proporción de la población en estado de pobreza de 40,8% en 2019 a 44,2% ahora.
El jefe de Estado aseguró que en los últimos tres meses “la industria toda se está moviendo” y convocó a que el actual sea “un momento fundacional para hacer otro país”, que deje atrás el debate si Argentina es un país agropecuario o industrial porque “Argentina es un país agropecuario e industrial”.
Fernández hizo estas declaraciones en Quilmes, durante el cierre de la 26ta. Conferencia Industrial, organizada por la Unión Industrial Argentina (UIA), para debatir los ejes de una agenda federal para la recuperación y el crecimiento.
En ese marco, sostuvo que su Gobierno fue “capaz” de “capear el temporal” de la pandemia de coronavirus, al destacar que a lo largo del año pudo “reconstruirse un entramado social que estaba absolutamente quebrado y lastimado”. “Seremos recordados por la historia como la generación de la pandemia”, destacó Fernández.
El Presidente indicó que ante la irrupción de la pandemia el país estaba “sin hospitales ni camas de terapia intensiva, y el virus nos corría”, pero resaltó que “en medio de semejante crisis logramos dos cosas: que no haya argentinos con hambre y que no haya habido un argentino que no recibiera la atención sanitaria que requirió”.
”En este tiempo donde la curva de contagios empieza a a bajar y la vacuna está cercana, quiero que todos estemos orgullosos de lo que fuimos capaces de hacer”, convocó.
Tras destacar la colaboración conjunta entre “trabajadores, empresarios y el Estado”, el jefe de Estado dijo que “por primera vez en muchos años, la recaudación está por encima de la inflación, la construcción empieza a movilizarse y la industria toda se está moviendo”.
En esa línea, llamó a los empresarios pensar si la opción es que Argentina “se mueva para repetir historias” o si, por el contrario, “este es un momento fundacional para hacer otro país”.
”Argentina tiene que volver al mejor de los capitalismos: ese que se preocupaba por invertir, arriesgar, producir, dar empleo y ganar, y todos esto mejorando la distribución del ingreso”, subrayó.
A su turno el titular de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, señaló que la industria puede y debe dar una respuesta federal que permita superar los dilemas de la Argentina.
“Necesitamos acordar una política de estado que cruce desarrollo territorial con desarrollo productivo. Esta tarea no la resuelven un presidente o un ministro o un gobernador por si solos. Tampoco los empresarios ni los sindicalistas no los medios de comunicación. Es una tarea que requiere acuerdos de largo plazo con una estrategia integral que nos permita salir de la coyuntura y orientar los esfuerzos hacia el desarrollo productivo”, planteó.
En tanto, durante el panel “Hacia un sendero de recuperación económica sostenible”, el ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró esta tarde que se advierte “una recuperación más sólida” en el nivel de actividad aunque con “una dinámica heterogénea”, y ratificó que se avanza en “un puente de estabilidad” hasta 2021, cuando entrará en vigencia el Presupuesto que será “el pilar central en la estrategia económica”.
Al participar de 26ta. Conferencia Industrial, Guzmán destacó el crecimiento real por tercer mes consecutivo de la recaudación fiscal, una dinámica positiva en la reducción de la brecha cambiaria y la elaboración de un programa plurianual basado en políticas de Estado.