El Sindicato de Textiles de Reconquista alertó que la situación “no admite más demoras” y reclamó que el Estado no se desentienda de una empresa considerada estratégica para la región
La crisis de Algodonera Avellaneda, una de las principales plantas textiles del norte de Santa Fe y perteneciente al Grupo Vicentin, mantiene en vilo a más de 350 trabajadores ante la falta de producción, salarios impagos y la incertidumbre sobre el futuro de la empresa.
En una reunión en la Legislatura santafesina, los representantes de los trabajadores expusieron la ausencia de respuestas oficiales y pidieron la intervención del Gobierno provincial como mediador entre la Justicia y posibles inversores, con el fin de evitar el cierre definitivo de la planta ubicada en Reconquista, que permanece detenida desde hace semanas en medio de un proceso concursal.
El Sindicato de Textiles de Reconquista alertó que la situación “no admite más demoras” y reclamó que el Estado no se desentienda de una empresa considerada estratégica para la región.
Los legisladores provinciales, entre ellos Lucila De Ponti y Joaquín Blanco, coincidieron en la necesidad de preservar la fábrica y criticaron las políticas económicas nacionales, señalando que la apertura de importaciones y la caída del consumo profundizan la crisis del sector textil.
De Ponti destacó que la algodonera “es sustentable si se gestiona correctamente” y reclamó un plan que garantice su continuidad. En tanto, los trabajadores denunciaron que no cobraron los sueldos de octubre, que las máquinas están paradas y que el impacto social y económico ya se siente en toda la región.
Los diputados advirtieron que el cierre definitivo de Algodonera Avellaneda representaría “una pérdida irreparable para Reconquista y para la provincia de Santa Fe”.
