Al menos cuatro personas murieron y otras 90 resultaron heridas tras la explosión de un coche bomba en Kabul, capital de Afganistán. Entre los fallecidos, según confirmó el portavoz del ministerio afgano del Interior, Najib Danish, hay tres guardias de seguridad y un civil.
«El ataque tuvo lugar poco después de las 19.00 hora local cerca de Green Village», afirmó Danish, antes de añadir que la situación se encuentra «bajo control».
Según explicó, las fuerzas especiales llegaron al lugar del incidente y comenzaron la búsqueda de los sospechosos y se aseguraron que no existiera otro vehículo cargado de artefactos explosivos. El funcionario, según replicó el portal DW, afirmó que se trató de una bomba improvisada.
Por el momento, ningún grupo insurgente ha reclamado por el momento la autoría de la acción.
Kabul sufrió en los últimos meses un gran número de ataques de envergadura contra todo tipo de objetivos, desde miembros de la minoría chií hasta trabajadores involucrados en las elecciones parlamentarias del pasado 20 de octubre, candidatos y electores. El último de ellos tuvo lugar a finales de diciembre cuando una sede gubernamental fue asaltada y, en los combates por liberarla, murieron 48 personas y 27 resultaron heridas.
Entre los 90 heridos, hay 26 menores de edad.