El director de la Agencia Argentina de Inversiones y Comercio Internacional (Aaici), Juan Pablo Trípodi, afirmó que en el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea (UE) «no hay definido ningún perdedor: los sectores en los que la Argentina es menos competitivo tendrán quince años para adecuarse, y si en ese tiempo no lo logramos, algo se está haciendo mal».
«Se van a beneficiar menos los que no tengan la capacidad de adaptarse», resumió Trípodi en declaraciones que publica hoy el periódico «El Economista».
El funcionario señaló que «una de las partes más positivas del acuerdo es que en los productos que van del Mercosur hacia la UE el período de baja de aranceles es mucho más corto, incluso hay sectores a los que aplica desde el primer día, mientras que los productos que vienen hacia acá (la desgravación) se extiende hasta quince años en algunos casos».
«Esa es una de las partes necesarias para que en ese período las empresas argentinas logren tener la competitividad suficiente como para estar de igual a igual frente a empresas europeas», agregó Trípodi.
Para el titular de la Aaici, el sector frutihortícola «es uno de los más beneficiados», junto a «sectores de las economías regionales que de alguna manera estaban aplastadas por falta de mercado y ahora se les abre esta oportunidad».
Por ejemplo, mencionó, «lácteos, que es un sector que podría sentirse amenazado por los productos europeos, la amenaza es mínima».
«El Mercosur produce 1.500 millones de toneladas de queso y la importación de quesos que vengan de la UE, contemplados en el acuerdo, es de sólo 30 millones para todo el Mercosur», explicó Trípodi.
Justamente, sostuvo, «se buscó proteger a ese tipo de sectores», como calzado y textiles, que tienen quince años para ponerse en igualdad de condiciones.
«Uno podría pensar que esos serían los perdedores, pero en el fondo uno elige ser perdedor, porque es no adaptarse y mejorar. Otra cosa que es muy positiva -indicó- es que esto nos va a ayudar a nosotros mismos a mejorar nuestro nivel de calidad y de competitividad, para estar en la capacidad de abastecer a un mercado tan grande».
Trípodi recordó que «detrás del acuerdo con la UE ya se está en proceso de negociación con la Efta (Acuerdo Europeo de Libre Comercio, integrado por países que no están dentro de la UE) y es muy probable que salga dentro de muy poco».
También están en agenda, detalló, «Canadá, Corea, Singapur, eventualmente Japón y Estados Unidos: cuanto más integrados estemos al mundo, mejor».
«Actualmente la Argentina tiene acuerdos con países que representan menos de 10% del PIB mundial y con este de la UE pasaría a estar un poco por encima de 30%, que sería un cambio enorme. mientras Chile, por ejemplo, tiene acuerdos con países que representan 90% del PIB mundial», concluyó Trípodi.