Info General

Advierten que se pueden producir enfermedades fúngicas y bacterianas en la soja


Un estudio dejó en claro que las grandes lluvias y el clima inestable pueden generar bacterias en cultivos agrícolas

Un estudio dejó en claro que las grandes lluvias y el clima inestable pueden generar bacterias en cultivos agrícolas

Las lluvias intensas que provocan inundaciones en diversas zonas de producción rural agrícola afecta directamente a los cultivos. Si a los días de lluvias se les suman los días nublados y la gran humedad atmosférica de todas esas jornadas, se advertirá fácilmente que estas condiciones ambientales predisponen la aparición de enfermedades.

Debido a ello, la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres de Tucumán desarrolló un informe al respecto e hizo hincapié en el cultivo de la soja.

Las enfermedades de la soja están consideradas como importantes factores que reducen los rendimientos de los cultivos de esta oleaginosa. La distribución y la severidad de estas patologías varían según cada región, y dependen de varios factores, entre los que figuran las condiciones ambientales y las prácticas culturales. El conocimiento de dichos parámetros permite orientar las estrategias y las tácticas de manejo del complejo de enfermedades.

La presente campaña de soja se caracteriza por la presencia de lotes sembrados en fechas tempranas (entre fines de noviembre y principios de diciembre del año pasado), los cuales se encuentran actualmente en estadios fenológicos R2 y R3. En tanto, los lotes de siembra tardía (primeros días de enero de este año) se encuentran aún en estadios vegetativos avanzados e inicio de floración (R1).

Las precipitaciones favorecen la presencia y el desarrollo de la mayoría de las enfermedades de la soja. Las patologías que afectan la parte aérea del cultivo pueden ser originadas, entre otros, por hongos, por bacterias y por virus. Dentro de las de origen fúngico hasta el momento se detectaron:

  • mancha marrón: con valores máximos de incidencia del 100% y valores de severidad de un 20%.
  • mildiú y mancha anillada: con valores bajos de incidencia -de un 10% a un 20%- y severidad de un 1% a un 5%.
  • mancha ojo de rana (se detectó el 13 de febrero en un lote comercial de La Virginia): con un valor de incidencia de un 30% y una severidad de un 5%. Debido a la naturaleza policíclica del patógeno y a la agresividad potencial de esta enfermedad se recomienda monitorear con frecuencia los lotes afectados y tener en cuenta la posible ocurrencia de condiciones ambientales favorables para su desarrollo, para realizar un correcto manejo de esta patología.

Entre las enfermedades de origen bacteriano se detectó la mancha parda bacteriana, tizón bacteriano y pústula bacteriana. Cabe advertir que a esta última se la podría confundir con roya asiática de la soja, por lo que se recomienda realizar un correcto diagnóstico.

Cuando el cultivo se encuentre en estadios reproductivos se recomienda realizar semanalmente el monitoreo de los lotes comerciales. Además, se insiste con la necesidad de realizar un correcto diagnóstico de las enfermedades para, a partir de la información precisa, definir la mejor estrategia de manejo. Asimismo, resulta fundamental que los productores estén atentos a la detección de la roya asiática de la soja y a las condiciones predisponentes; ya que, si no se toma una correcta medida de control, podría afectar severamente aquellos lotes sembrados durante los primeros días de enero.