Informes CLG

#InformeCLG

A un año y medio del hundimiento: ¿qué pasa con el ARA San Juan?


CLG dialogó con el padre del único santafesino a bordo del buque y con el hermano del jefe de máquinas para conocer cómo se encuentra la causa

Por Matías Gregorio

El pasado 23 de abril, los familiares de los tripulantes del ARA San Juan vieron por primera vez las imágenes del submarino que se hundió a 200 kilómetros de la costa argentina el 15 de noviembre de 2017 con 44 personas a bordo. Con dolor, angustia y mucha bronca, esposas, padres, madres y hermanos de los submarinistas pudieron ver una imagen completa del submarino hundido.

Primero se mostró un mosaico con las 67.000 fotos superpuestas y entregadas a la Justicia, y luego fue el turno de los 11 videos: nueve de media hora de duración, uno de tres minutos y otro de 18 segundos, que fueron tomados por el vehículo submarino con operación remota (ROV por sus siglas en inglés) de la empresa Ocean Infinity que permitió el hallazgo de la nave.

La jueza federal de Caleta Olivia Marta Yáñez, quien está a cargo de la causa que investiga el hundimiento del buque y dispuso la proyección de las imágenes, está en la mira de los familiares por su desempeño, ya que aseguran que a pesar de tener todas las pruebas suficientes como para actuar e imputar a los supuestos responsables, sigue dilatando el tema.

A un año y medio del hundimiento del ARA San Juan, CLG dialogó con Jorge Lucio Suárez, padre de Germán Oscar Suárez, cabo primero que trabajaba como sonorista en el sumergible y único santafesino a bordo de la flota, y con Claudio Rodríguez, hermano de Hernán Ramón Rodríguez, el suboficial mayor de la nave, oriundo de General Alvear, Mendoza.

Germán Suárez, a la izquierda, y Hernán Rodríguez, a la derecha, en zona de embarcación.

Jorge vio las imágenes en el Juzgado Federal de Santa Fe, junto con una señora oriunda de Jujuy que estaba en Rosario ya que uno de sus hijos trabaja en la policía local. «Todos los padres tuvimos que dejar los celulares antes de ver la videoconferencia, así lo pidió la jueza. Fue una payasada. Viendo las imágenes se sentían las risas de ella y de sus secretarias», criticó.

«Se puede ver que los tubos lanzatorpedos están doblados y salidos, lo que demuestra que implosionó a los 400 metros, no a los 900 como dice la Armada para sacarse responsabilidades porque no mandaron ningún apoyo cuando se incendió. El submarino está arrugado como si un camión choca contra un auto desde atrás hacia delante. Por la presión, se abrió hacia arriba una parte de los motores y se rajó la parte donde estaban los oficiales. El sector donde está mi hijo resistió», amplió Suárez.

Por su parte, Claudio pudo ver las imágenes junto a su madre en el Juzgado Federal de Mendoza: «Sentí mucha bronca porque mi hermano no tendría que haber terminado ahí. Ya ni lloramos, se nos habían acabado las lágrimas. Nos dimos cuenta que no hubo posibilidad de que se salvaran». «Estamos seguros que los cuerpos ya no están ahí, porque no sobrevivió nada. La presión del agua es tan fuerte a esa profundidad que los tejidos blandos desaparecen», sentenció Rodríguez.

«Es un proceso de mucho dolor. No se puede explicar. Vimos dónde están nuestros hijos. Es indescriptible, no tengo palabras en el diccionario para decirlo. Y más sentir cuando se reían. No se lo deseo a nadie, ni a mi peor enemigo», sostuvo con bronca y dolor el papá de Germán, el joven nacido en el barrio Sargento Cabral de la ciudad de Santa Fe.

En las imágenes proyectadas trascendió que se pudo ver con claridad un saco de uniforme de un oficial, situación que fue narrada por Jorge: «La paradoja es que se vio el uniforme de gala del hijo del capitán de navío Jorge Bergallo, quien no quería que los busquen y que firmó el informe de la Armada donde le echan la culpa a su hijo, segundo en responsabilidades en el submarino. Cada uno carga con su conciencia».

Muchos familiares reclamaron que la calidad de las imágenes no era buena.

Pocas novedades y muchas sospechas

El submarino fue hallado el 17 de noviembre de 2018, muy cerca del punto de desaparición, a 907 metros de profundidad, en un hecho muy confuso porque la zona ya había sido explorada al inicio de la búsqueda. Seis meses después, las novedades son escasas. «El único avance es haber visto las imágenes que la jueza ya las tenía desde hace medio año. Después no imputó a nadie ni convocó a los responsables, tiene la causa planchada por la presión que existe», reclamó Jorge Suárez.

En el mismo sentido, el hermano de Hernán Rodríguez dijo que «la jueza sigue dando vueltas cuando ya tenemos las pruebas que faltaban». Además, contó que en febrero, cuando terminó la feria judicial, Marta Yáñez fue a ver al ministro de Defensa, Oscar Aguad, y a los jefes de la Armada, «las instituciones que están sospechadas».

«Está en contra de nosotros y vive yendo a la Armada porque responde a ellos. Mientras esté esta mujer estamos en stand by. Pero el tiempo le está jugando en contra, porque en un año y medio el único hecho concreto que le dio a los padres fue ver el video que solicitó el querellante Luis Tagliapietra. Lo tuvo seis meses para mostrar y encima al otro día se filtró», expresó muy enojado el papá de Germán, quien tenía 29 años y trabajaba desde hace 4 en el ARA San Juan.

El error más puntual que cometió la jueza, según su parecer, fue que al comenzar la conferencia donde proyectaron las imágenes, la jueza dijo ‘vamos a empezar sabiendo que el ARA San Juan salió en perfecto estado’. «Nunca puede decir eso porque no es cierto. Tenía 45 meses sin reparación. Una esposa de una de las víctimas le presentó fotos y videos de cómo se alumbraban con los celulares cuando se cortaba la electricidad. Ella pidió declarar, pero la jueza sólo le aceptó las pruebas y no la volvió a llamar».

Claudio Rodríguez (izquierda) y Jorge Suárez (derecha) siguen pidiendo justicia y verdad.

Para el santafesino los dos responsables principales del «asesinato» son el capitán de navío Claudio Villamide, que era jefe de la flota de submarinos, y el ex comandante de Adiestramiento y Alistamiento de la Armada (COAA), Luis Enrique López Mazzeo. Ambos fueron separados de sus funciones por un sumario Interno de la Auditoría General de la Armada Argentina, que ya está a punto de ser cerrado y contará su versión de los hechos. «Se pelean y se denuncian entre ellos, mintieron todos cuando tuvieron que contar lo que pasó», agregó Suárez.

A su vez, Claudio Rodríguez contó su parecer de los hechos: «Los dos chicos que se bajaron en Ushuaia contaron los problemas que tuvieron. Hay testimonios escritos del capitán diciendo que lo lleven a dique seco (NdR: nombre de las instalaciones portuarias destinadas a poner las embarcaciones fuera del agua para efectuar reparaciones en su parte externa) porque les entraba agua y le fallaban muchas cosas. Eso debe hacerse cada 18 meses, la Armada lo extendió hasta 24 y terminaron siendo más de 45 los meses sin ir a reparaciones. Hay documentos donde capitanes han firmado que no podía bajar más de 80 metros porque tenía ciertas limitaciones, cuando el submarino tiene que poder andar a 350. A esto se le suma que la noche anterior tuvieron un principio de incendio en las baterías porque les había entrado agua. Y ahí falló la orden de los jefes de tierra diciéndoles que dejen lo que estaban haciendo y vayan a Mar del Plata. Tendrían que haberles dicho que abandonen la nave en los botes salvavidas o pedir ayuda a buques pesqueros, Prefectura, o helicópteros, pero darles la orden de que se queden arriba, en el agua, no que naveguen y se sumerjan».

«Y lo más triste es que yo lo veo morboso. ¿Quién me explicaba lo que había pasado y que estaban ahí abajo? La misma Armada que les dijo siga siga. Es como si la policía mata a una persona y ellos mismos hacen la investigación y ellos mismos les cuentan a los familiares cómo se murió la persona. Es morboso», afirmó con elocuencia el hermano de Hernán, quien era el encargado del departamento de máquinas del submarino y ya llevaba más de diez años arriba del ARA San Juan.

La jueza Yáñez busca peritos que no tengan ningún interés particular en la causa para analizar las imágenes.

La Comisión Bicameral dará su veredicto

Los diputados y senadores que integran la Comisión Bicameral que fue creada en el Congreso para investigar el hundimiento del buque confeccionarán durante mayo su informe final, para ser entregado en junio a la jueza de Caleta Olivia. El informe, que no es vinculante, tendría coincidencias en la forma del hundimiento, pero divergencias en las responsabilidades en torno al mantenimiento y fallas detectadas por diversos peritos.

«No voy a descartar nada. Voy a tener en cuenta el informe de la Comisión Bicameral del Congreso sobre las causas del naufragio. Es una tragedia en tiempos de paz que no conoce precedentes», anticipó días atrás la jueza Yáñez.

Claudio espera que la Comisión «haya entendido todos los planteamientos que nosotros les hicimos y hagan una deducción más rápida y más fuerte que la de la jueza, porque tuvieron la posibilidad de entrevistar y hablar con todos». Y amplió: «Si hay un poco de coherencia y lógica, van a determinar que hay responsables, y que no pueden ser los que están abajo. Después habrá que ver si los escuchan». Jorge coincidió con lo dicho: «Aparentemente el informe va a ser bueno y seguro influya en la causa».

La Bicameral del ARA San Juan tiene tiempo hasta julio para entregar el informe final.

¿Responderá Macri?

A fines de abril, la jueza federal a cargo de la causa hizo lugar al pedido del abogado querellante Luis Tagliapietra, padre del teniente de corbeta Alejandro Damián Tagliapietra, uno de los marinos fallecidos en el naufragio, y le envió al presidente Mauricio Macri un cuestionario con cinco preguntas para que informe por escrito qué sabía acerca del estado del submarino ARA San Juan.

Aún así, Jorge Suárez detalló que la jueza no le puso una fecha límite al máximo mandatario para que responda el formulario. «Está complicado porque es el Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas. Por Constitución, todo lo que pase sobre sus subordinados recae sobre él. Y acá le espera un juicio con 44 muertos. Si no gana las elecciones, van a pedir que no salga del país. Ni él ni Aguad», adelantó.

Claudio, que se postuló al cargo de intendente de General Alvear y competirá en la interna de Unidad Ciudadana, también se mostró muy disconforme con el accionar del gobierno de Mauricio Macri en torno al hundimiento del buque: «Si no se va este gobierno, no vamos a tener nunca justicia por los chicos. Por eso milito para que así sea».

En el ojo de la tormenta: Aguad y Macri han sido muy criticados por su labor en relación al submarino.

No bajan los brazos

A pesar de los obstáculos que deben seguir sorteando a diario, ambos padres confían en que tarde o temprano se sabrá la verdad y habrá justicia porque las pruebas son «irrefutables».

«Es una lucha larga porque peleamos contra el gobierno, la Justicia, los políticos y los navales o ex navales. Pero vamos a tener justicia. Nunca pasa nada hasta que pasa todo de golpe. Tenemos fe de que vamos a ganar, porque tenemos la verdad, y más importante que eso, tenemos las pruebas y los testigos», aseguró Jorge.

Los familiares, que siguen divididos en dos grupos, aquellos que se encolumnaron detrás del mediático abogado Fernando Burlando y el resto que trabaja a codo con Luis Tagliapietra, afirman que todo el pueblo argentino está con ellos, lo que se demuestra a diario con nuevos homenajes y esculturas creadas en distintos puntos del país. Por ejemplo, en una escuela de Santa Fe capital construyeron una réplica del submarino de 300 kilos y crearán el paseo ARA San Juan sobre la costa del río Paraná.

Por el momento, la idea de reflotar el submarino parece utópica, y «más con este gobierno», según dijeron, porque se sabría «toda la verdad».

Serán tiempos de informes y versiones cruzadas. La Comisión Bicameral, la Armada y la jueza, con ayuda de peritos del exterior que analizarán las imágenes, darán su parecer. Mientras, en el fondo del mar, 44 almas esperan obtener justicia para descansar en paz.