La actriz estadounidense falleció a causa de una neumonía combinada con un cáncer de pulmón
La actriz estadounidense Linda Manz, recordada por su papel en el filme “Días de gloria”, de Terrence Malick, rodado en 1978, falleció el pasado viernes en la ciudad de Nueva York a los 58 años, a causa de una neumonía combinada con un cáncer de pulmón, señaló la prensa especializada de su país.
Además de ese título, se la pudo apreciar en “Los pandilleros” (1980), de Philip Kaufman, y si bien se encontraba alejada de la pantalla desde 1997, cuando actuó en “El juego”, de David Fincher, su rostro se había vuelto muy popular en la escena “indie” estadounidense de principios de los 80.
Había nacido en el seno de una familia con problemas y padre ausente en la misma ciudad en que murió, el 20 de agosto de 1961, tuvo una infancia francamente dura y su dulzura y encanto andrógino llamaron la atención en su debut en la película de Malick, junto a Richard Gere, Brooke Adams y Sam Shepard.
Su voz adolescente servía de guía al espectador en una narración en “off” que lograba conmocionar pese a su inexperiencia en ese drama rural ambientado en los grandes campos de trigo de Texas a principios del siglo XX, mientras sonaba una inolvidable partitura de Ennio Morricone.
En 1983 viajó a Alemania para protagonizar “Mir reicht’s – ich steig aus”, de Gustav Ehmck, no estrenada en la Argentina, y dos años después intervino en un episodio de la serie “Teatro de cuentos de hadas” y se casó con el camarógrafo Bobby Gutrie, con el cual tuvo tres hijos.