El argentino Santiago Solari, hasta ahora entrenador interino del Real Madrid, fue confirmado en sus funciones por el club merengue, que hizo homologar este lunes su contrato, según confirmó a la agencia internacional francesa AFP la federación española (RFEF).
«Todo está en orden. El Real Madrid se ocupó de su contrato y no hay problema», dijo la RFEF. El interinato de Solari, de 42 años, ex entrenador del conjunto filial nombrado a finales de octubre, no podía pasar de 14 días, según el reglamento.
Designado a finales de octubre después de una humillación en el Clásico en Barcelona (5-1), el entonces entrenador del filial debía reemplazar «provisionalmente» a Julen Lopetegui, despedido por sus malos resultados. Pero sin demasiados entrenadores disponibles en el mercado a media temporada y tras dos semanas en el banquillo, el argentino convenció a los jugadores, los aficionados y los dirigentes con su estilo sonriente y determinado pero sobre todo con sus resultados.
La victoria ante el Celta de Vigo el domingo (2-4), el primer encuentro de entidad en un calendario bondadoso para Solari, confirmó su impacto en la dinámica del equipo. Después de cinco derrotas en los últimos siete partidos de la era Lopetegui, el Madrid cuenta sus partidos por victorias en los cuatro enfrentamientos dirigidos por el argentino.
Bajo su batuta, los campeones de Europa las últimas tres temporadas consiguieron 15 goles y solo encajaron dos, el mejor arranque de la historia para un entrenador del Real Madrid. Incluso los resultados ajenos le favorecen: la derrota del líder, el FC Barcelona, el domingo ante el Betis (3-4), coloca a los blancos a solo cuatro puntos de la cabeza de la Liga. Y en Liga de Campeones se encuentran muy cerca de cerrar la clasificación para los octavos de final antes de enfrentarse a la AS Roma el 27 de noviembre.
De tono reposado y benevolente, el ex centrocampista merengue (2000-2005) podría seguir los pasos de Zinedine Zidane, que también entrenó al filial antes de subir al primer equipo en 2016 y llevarse tres Ligas de Campeones consecutivas.
El primer desafío de Solari será conservar el título de campeón del mundo de clubes, que se jugará del 12 al 22 de diciembre en los Emiratos Árabes Unidos.