Referentes del sector plantearon que la suba es indispensable para sostener el servicio.
La discusión por la actualización de la tarifa de taxis volvió a tensarse este martes en el Concejo Municipal. Tras el pedido de un incremento del 25% presentado la semana pasada, los titulares de licencias retomaron la presión y exigieron a la comisión de Servicios Públicos que avance cuanto antes en una definición, en un escenario marcado por la caída de viajes y la competencia creciente de aplicaciones no habilitadas.
La Cámara de Titulares de Licencias de Taxis (CATILTAR) y la Asociación de Titulares de Taxis Independientes de Rosario (ATTI) plantearon que la suba es indispensable para sostener el servicio. Pero al mismo tiempo, reconocen que el escenario económico y la baja demanda obligan a actuar con cautela.
“La actualización es justa, real y necesaria”
José Iantosca, referente de CATILTAR, sostuvo ante los concejales que el pedido de aumento “es justo, real y necesario”, aunque pidió que sea el propio Concejo el que resuelva el porcentaje final para evitar efectos adversos. “El miedo es que no se trabaje. Quiero que la tarifa la definan ustedes”, expresó.
El dirigente advirtió que, aunque los indicadores técnicos respaldan una recomposición, la fuerte disminución de viajes atenúa cualquier diagnóstico favorable. Además, reclamó que la actualización quede firme antes del 1º de diciembre: “Si no, no nos sirve. Tomen ustedes el camino de sí o no a una actualización”.
Iantosca también pidió reforzar los controles contra los traslados realizados mediante aplicaciones no habilitadas y propuso convocar al secretario de Control, Diego Herrera, para coordinar operativos conjuntos.
Apps, recesión y menos viajes
Por su parte, Mario Cesca, de ATTI, recordó que históricamente la tarifa se fijaba a partir de los datos del odómetro —cantidad de viajes y fichas—, pero la irrupción de las aplicaciones con descuentos masivos alteró completamente esa referencia.
Sobre la tarifa 1, con descuentos para determinados segmentos, propuso acotarla de lunes a viernes hasta las 22: “Bajando la tarifa no van a venir nuevos pasajeros. Seguimos con mentalidad hiperinflacionaria y estamos en recesión”, señaló.
Ambas entidades remarcaron que la crisis del sector ya afecta a unas 2.000 familias en Rosario y que, de no mediar cambios, ese número podría escalar a 2.800 hacia junio de 2026.
Qué viene ahora
La comisión de Servicios Públicos decidió pasar a cuarto intermedio para seguir analizando el tema, que también incluye la prórroga por antigüedad de las unidades. La definición final sobre la tarifa deberá resolverse en las próximas semanas, en un Concejo que sigue recibiendo presiones cruzadas en medio de la recesión y la disputa con las plataformas de transporte.
