El desarrollo de unos guantes «inteligentes» y de bajo costo capaces de traducir al castellano el lenguaje de señas que utilizan las personas sordas, es uno de los proyectos argentinos que el próximo martes será reconocido en la segunda edición del Concurso Appccesible que organizan la ONG por la inclusión Cilsa y la filial local de Microsoft.
«Smart Gloves» es una innovación nacida en la ciudad de Córdoba, diseñada con hardware y software libre, componentes que hacen bajar sensiblemente los costos de una futura producción. Agustina Paredes, técnica superior en mecatrónica de la UTN, reveló cómo creó el proyecto en sólo 3 meses y durante sus momentos libres, al encargarse del diseño de los sensores, de la programación del controlador y de la aplicación que hace la traducción de los gestos.
«Me motiva cuando se plantea una problemática social abierta a ideas que puedan resolverse desde el área de las tecnologías. Básicamente, me gusta inventar dispositivos que ayuden a las personas», comentó Paredes.
La creadora de Smart Gloves explicó que, según pudo investigar, sólo existen algunos desarrollos similares en ámbitos universitarios.
«En general se trata de tesis universitarias que usan componentes y sensores creados por empresas y lo mismo sucede con el software. Yo busque crear los sensores, use un controlador abierto y, para diseñar la aplicación, usé App inventor, que es del MIT y que es liberado para su uso», añadió.
La elección de insumos «libres» para el desarrollo se debe a que realizarlo con productos comerciales similares tendría costos tan elevados que lo haría restrictivo para buena parte de los posibles usuarios de la comunidad sorda. En cambio, Smart Glove puede ser replicado y modificado por cualquier persona que entienda de programación y robótica.
«Mi idea es seguir investigando y trabajar con los mentores para depurar el código. Para seguir con el proyecto se va a necesitar un equipo», añadió.