Por Camila de la Rosa – Especial para CLG
En esta reflexión en forma de poema, Camila de la Rosa, trabajadora, pone en palabras el dolor y la urgencia de defender dos pilares fundamentales: la salud y la educación. Con una voz que interpela y convoca, advierte sobre los riesgos del abandono y llama a no ser indiferentes frente a lo que está en juego.
«Despertemos, pueblo, que el tiempo apremia» es más que una frase: es un llamado colectivo a luchar por el futuro.
AQUÍ EL ESCRITO
En la pampa del olvido, un eco se alza, la tijera implacable, sin piedad ni calma.
Corta los hilos de la esperanza y la razón, dejando a oscuras el saber y la sanación.
La escuela, templo sagrado, hoy parece vacía, su voz silenciada por la cruda agonía.
Y el hospital, refugio de cuerpos y almas, sangra en su abandono, ignorando las alarmas.
Un grito de injusticia, un murmullo de dolor, en cada aula cerrada, en cada pasillo sin calor.
No seamos ciegos, no seamos indiferentes, que el futuro no se nos muera entre las manos ausentes.
Despertemos, pueblo, que el tiempo apremia, antes que la oscuridad se trague a nuestra Bohemia.
Luchemos por lo nuestro, por la luz, por el saber, para que la salud y la educación vuelvan a florecer.
(*) Podés enviar tu texto a conlagenterosario@gmail.com
