Después del éxito de series como la española «La casa de papel» y la alemana «Dark», Netflix producirá nuevas series en Europa para su público mundial, en otras lenguas que el inglés, indicó el miércoles el gigante estadounidense.
«Hemos visto que series realizadas en Europa han hallado gigantescas audiencias mundiales, compuestas muy ampliamente por públicos situados fuera del país de origen», explicó a la AFP Greg Peters, director de Innovación del Producto en Netflix.
«Para Dark, por ejemplo, el 90% de los visionados tuvieron lugar fuera de Alemania, Austria y Suiza. ¿Cuántas series alemanas conoce que hayan logrado alcanzar semejantes audiencias fuera de estos países?», prosiguió.
En el marco de la feria digital Web Summit, que se celebra esta semana en Lisboa, Peters reveló concretamente dos nuevos proyectos europeos.
En 2020, se prevé el estreno de la serie española «Alma», en la que una joven sobrevive a un accidente sobrenatural pero pierde la memoria, con Sergio Sánchez, director de la película de terror «El secreto de Marrowbone», al mando.
También en esa fecha saldrá «Ragnarok», la primera producción noruega de la plataforma y en la que Adam Price, principal autor de la serie danesa «Borgen», imaginó un dios de la mitología nórdica que se reencarna en adolescente del mundo moderno.
Peters explicó al público del Web Summit que en los últimos tres años, el 90% de los contenidos originales de la Unión Europea difundidos en horas de gran audiencia solo fueron exhibidos en «dos países europeos o menos. Es muy limitado».
«Hay muchas historias que no se contarían si fueran únicamente producidas por las televisiones tradicionales», dijo en la entrevista con la AFP.
El gigante estadounidense, con 137 millones de abonados en 190 países, ha hecho temblar a las cadenas de televisión. En Europa, Carolyn McCall, dirigente del grupo audiovisual británico ITV, reconoció a Netflix el mérito de «hacer pagar a la gente por los contenidos».
Pero para la BBC o los dirigentes del sector audiovisual francés, la plataforma es sobre todo un enemigo. El grupo France Télévisions, por ejemplo, prevé dejar de vender sus series a Netflix. Junto a sus compatriotas TF1 y M6, lanzará en 2019 Salto, una plataforma común que aspira a competir con el gigante estadounidense.
Algunos críticos subrayaron no obstante que para rivalizar con Netflix, haría falta un proyecto a escala europea.