La dirigencia canalla presentará el próximo 20 de mayo una propuesta para ceder el inmueble a cambio de infraestructura en tres predios clave. La medida, que deberá ser aprobada por los socios, generó debate interno.
Rosario Central convocó para el lunes 20 de mayo a una Asamblea General Extraordinaria y Ordinaria, en la que el oficialismo buscará la aprobación de su presupuesto anual. Pero el punto que ya despertó polémica entre los socios es la posible transferencia del predio ubicado en calle Oroño, una operación que, según aclaró la dirigencia, no será una venta sino una permuta por obras.
Walter Buhler, tesorero del club, explicó en diálogo con Radio 2 que “no se trata de una venta, sino de una permuta con contraprestación de obras en diferentes predios de Rosario Central”. Y subrayó: “Todo está supeditado a lo que decidan los socios en la Asamblea”.
La idea, según el dirigente, es utilizar ese canje para jerarquizar la infraestructura deportiva de la institución. El plan incluye intervenciones en tres espacios: Ciudad Deportiva, el Clubsito y el nuevo predio de Cruce Alberdi.
En Ciudad Deportiva, se proyecta la construcción de un gimnasio cubierto con medidas reglamentarias para múltiples disciplinas, además del traslado de la cancha de hockey y la creación de un nuevo campo de fútbol con césped sintético.
En el Clubsito, ubicado en la zona norte de Rosario, se plantea también un polideportivo cubierto para futsal, vóley y otras actividades deportivas, con el objetivo de mejorar las condiciones para los deportistas amateurs.
Por último, en el nuevo terreno del Cruce Alberdi, Buhler adelantó que Central quiere construir tres canchas de fútbol 7, lo que permitiría fortalecer la Escuela de Fútbol en un punto estratégico para la detección de talentos, sin depender exclusivamente de Ciudad Deportiva.
Respecto del predio de Oroño, el tesorero fue contundente: “Hoy funciona un bar y una cancha de vóley. Recibimos denuncias y hay incomodidad entre vecinos. Creemos que no cumple con un rol clave para nuestros deportistas y que es el espacio con menor funcionalidad del club”.
Con este esquema, la dirigencia apuesta a transformar activos subutilizados en infraestructura deportiva, aunque la decisión final quedará en manos de los socios, que debatirán la propuesta en la Asamblea del 20 de mayo.
