Política y Economía

La apertura importadora de Milei pone en jaque a la industria nacional: “Hay 20.000 pymes y 350.000 cuentas sueldo menos”


El escenario actual ya muestra cierres de empresas, esquemas de suspensiones y una creciente preocupación en el sector. Juan Ciolli, dirigente pyme, detalla cómo es producir en la Argentina y asegura que con el Gobierno “no hay canales de diálogo”

La política económica del gobierno de Javier Milei, centrada en la apertura irrestricta de las importaciones, está generando un fuerte impacto negativo en la industria nacional. El escenario actual ya muestra cierres de empresas, esquemas de suspensiones y una creciente preocupación en el sector pyme, donde la situación es calificada como crítica.

Desde la Central de Entidades de Empresas Nacionales (CEEN), su titular Juan Ciolli —también empresario pyme y propietario de una fábrica de carpetas escolares, comerciales y empresariales— trazó un diagnóstico alarmante: “Lo estamos viviendo mal desde el inicio de este gobierno porque vivimos del mercado interno. Nosotros generamos el 70% o 75% de los puestos de trabajo. Con 20.000 pymes menos, 350.000 cuentas sueldo se han caído”.

Según Ciolli, la combinación de caída del consumo y apertura de importaciones conforma “un cóctel letal” para el entramado productivo nacional. “Sin trabajo, ¿cómo va a comprar la gente aunque los productos tengan menor precio? Porque este es el problema, que es un derrumbe en cascada: nos caemos nosotros, se caen nuestros trabajadores, se pierden salarios… ¿con qué se compra? Y también se caen grandes empresas”, expresó en diálogo con el programa Agenda Propia, por Canal Abierto.

El empresario también vinculó la coyuntura local con el contexto internacional, al mencionar la guerra comercial global desatada tras una medida del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. “Por la desregulación, hoy hay un fenómeno: nuestros clientes importan directamente. ¿Dónde se va a colocar la producción que los países no pueden colocar en Estados Unidos o en otros mercados? Cuando vos tenés todas las puertas cerradas y hay una abierta, por ese lado tenés que entrar. Y la única puerta abierta hoy es la Argentina”, lamentó.

Ante este panorama, Ciolli exigió al Gobierno una instancia de diálogo, pero aseguró que hasta ahora no han tenido respuesta: “No tenemos canal de diálogo con el Gobierno. Tener un diálogo con quien no quiere escuchar y mucho menos darte respuesta es muy difícil, es casi imposible”.

La gravedad de la situación también se reflejó en el alto nivel de acatamiento al paro general convocado por la CGT este jueves. En algunos sectores de la industria, la adhesión fue del 100%, un dato que muestra el profundo malestar e incertidumbre que atraviesan los trabajadores del sector.