Alberto Serra, presidente de la Cámara del Calzado de Santa Fe, compartió su visión sobre la medida y las consecuencias que esta tendrá en el sector
Una de las industrias más afectadas por la reciente decisión del Gobierno nacional de reducir los aranceles a las importaciones es la del calzado, un sector clave con una importante presencia en la provincia de Santa Fe. En este contexto, RTS Noticias dialogó con Alberto Serra, presidente de la Cámara del Calzado de Santa Fe, quien compartió su visión sobre la medida y las consecuencias que esta tendrá en el sector.
Al respecto, Serra expresó su preocupación al afirmar que «en primer lugar, nadie puede asegurar que este 15% de baja de aranceles se vea en el mostrador. Y en segundo lugar, le bajamos los impuestos a los chinos y le seguimos cobrando todo al fabricante nacional». Esta postura refleja el temor de los empresarios del sector, quienes temen que la medida no beneficie directamente al consumidor final y, por el contrario, afecte la competitividad de la producción local.
Además, el presidente de la Cámara del Calzado calificó la situación como una «tormenta perfecta», destacando el difícil escenario que enfrenta el sector. «Nuestros insumos y los servicios aumentan, baja el consumo argentino y a esto se suma el ingreso de productos chinos. Hoy no se vende ni el calzado importado, ni el nacional. Por lo tanto, las consecuencias para el sector serán gravísimas», afirmó, alertando sobre las dificultades que atraviesa la industria.
En cuanto a las acciones que se están llevando a cabo a nivel local, Serra informó que la Cámara está trabajando junto al gobierno provincial para ofrecer soluciones al sector. «Estamos trabajando en la posibilidad de créditos con tasas subsidiadas. Estamos que en 10 días podría estar operativa», comentó, lo que podría ofrecer un alivio parcial ante la situación económica adversa que enfrenta el sector del calzado.
La incertidumbre sobre el futuro de la industria del calzado en Santa Fe y en todo el país sigue creciendo, con un panorama económico que genera preocupaciones tanto para los fabricantes nacionales como para los consumidores.